Elevan tasas 'vs.' inflaci�n

La fortaleza económica tan cacaraqueada por el gobierno peñista, que no dio para crecimientos mayores a 2 por ciento promedio anual en el sexenio, se encuentra amenazada por el repunte inflacionario de junio.

El encarecimiento del precio mensual anualizado subió en junio a 4.65, 10 décimas más de lo registrado en abril con 4.55, lo que no es mucho pero cambia la tendencia a la alza cuando se había mantenido a la baja desde diciembre 2017 al llegar al tope de 6.77 por ciento anual.

Estas cifras están lejos del 3 por ciento anual, meta fijada por el Banco de México, institución que ha mantenido su política de aumento en las tasas de interés, hoy en 7.75 por ciento anual, y seguramente subirán nuevamente presionados por el incremento en la tasa base en Estados Unidos.

Lo peor es que la inflación al productor en junio aumentó a una tasa anual de 6.95 por ciento sin petróleo y con servicios, mientras que incluyendo petróleo y servicios subió a 9.22 por ciento, muy por arriba del registro anterior de 4.65 por ciento anual de los precios al consumidor.

A todo ello habrá que sumar que en septiembre próximo la Fed volverá a aumentar la tasa de interés otros 25 puntos base y ello genera que el Banxico mantenga su tendencia alcista en las tasas locales.

El peso, en cambio, rompió el piso de los 19 pesos por dólar pero no hay certeza de que la volatilidad disminuya, por lo que habrá que esperar tedencias mas duraderas.

Lo único cierto es que la economía mexicana sigue bajo riesgos y presiones.

AHORROS

El turismo ha sido la única actividad en el sexenio que se ha mantenido al alza y aún lo hace, aunque ha bajado su gran dinamismo, afectado principalmente por la inseguridad que se viven en amplias zonas del país.

En mayo, las divisas turísticas llegaron a 1,686 millones de dólares, 3.3 por ciento más que en el mismo mes del año anterior, pero fue el menor crecimiento desde 2011, lo cual es muy preocupante.

El propio secretario de Turismo, Enrique de la Madrid ha reconocido el efecto negativo de la violencia para la captación de turistas y divisas, pero no se ve mejoría por ningún lado.

Tanto en Cancún, Quintana Roo, como en Los Cabos, Baja California Sur, los dos principales polos de atracción turística, la delincuencia y las ejecuciones ha tenido un crecimiento sin  precedente. El fracaso del régimen peñista en materia de seguridad pública es total.

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