Chivas, al borde del caos

Posiblemente hay quien no esté de acuerdo al leer el título de la columna de hoy, y dirá que el Club Guadalajara no está al borde del caos, sino que ya está en él.

El presente no luce alentador y por lo tanto el futuro a corto plazo mucho menos.

Y la descomposición de un mundo que era muy feliz el año pasado, tras el doblete en liga y copa en 2017, no es que se haya dado a partir de la semana pasada.

En el primer acto se corre la versión de que el técnico Matías Almeyda está negociando su salida de Chivas luego de que la directiva no le cumplió sus peticiones de reforzarle el plantel con la gente solicitada.

Después estalla la bomba al darse por un hecho que El Pelado no es más el técnico rojiblanco y ya sólo queda llegar a un acuerdo en la forma de pago de su finiquito para hacer oficial su desvinculación del club.

Los jugadores reaccionan rabiosos en redes sociales apoyando a su entrenador como nunca antes lo habían hecho. Almeyda aparece en Instagram y agradece a manera de despedida. Matías ha mostrado el músculo, jugadores y afición están de su lado, y pase lo que pase él ya es una especie de dios.

Sólo falta la confirmación de la directiva que misteriosamente no se pronuncia.

Finalmente, Gabriel de Anda se levanta el domingo con ganas de hablar para confirmar lo que antes negó: la venta de Pizarro al Monterrey, pero para desmentir que Almeyda estaba fuera dejando la responsabilidad a los medios por hacer eco de una noticia no oficializada, además de negar tener un plan B pese a que hay pruebas de que sí habló con Mauro Camoranesi.

En la mañana lo ratifica, y por la noche en Fox Sports acepta que Matías le ha sugerido que empiece a buscar técnico, además de revelar más diferencias de planificación, y las fricciones con José Luis Higuera.

Para agregar más tensión, los jugadores citados a los reportes médicos el lunes por la mañana no se presentan, dando señales de que no están de acuerdo en los cambios del calendario de la pretemporada hecha por Almeyda, pero que arbitrariamente alteró De Anda.

Dicha rebeldía contradijo lo declarado el domingo por De Anda, quien aseguró que ya había hablado con todos los jugadores y les había aclarado la situación de Almeyda.

¿Cómo creer en un dirigente que un día afirma una cosa y horas después dice otra?

El presente es apenas la punta del iceberg. Lo que viene luce aterrador.

@ofares72

JJ/I