¿Y luego de las elecciones?

En pocos días se habrán terminado las campañas y en tres semanas tendremos presidente electo. Dadas todas las encuestas serias publicadas hasta ahora, no habrá sorpresas y el próximo presidente será Andrés Manuel López Obrador.

No solamente no habrá sorpresas, sino que esta elección será contundente. Casi podríamos vivir un fenómeno que no se veía en México desde la elección de Miguel de la Madrid: un presidente elegido por casi (o más del) 50 por ciento de la votación.

A pesar de lo apasionadas que puedan ser las campañas, la vida no termina ese 1 de julio. Inicia un largo periodo de espera hasta que el presidente electo sea efectivamente presidente en funciones. Cinco meses.

Mientras tanto, el gobierno federal entra en una fase de letargo. Nada urge ya, todo puede esperar. Al presidente y a sus funcionarios ya nada les importa, más que esperar la fecha en la que puedan entregar la responsabilidad a otro.

Eso asegura que la economía mexicana cierre 2018 sin sobresaltos internos. Es decir, la inercia económica la imprimirá un gobierno que va de salida a uno que va de entrada. Pero 2019 tampoco es de esperar grandes cambios en la política económica federal.

Principalmente porque el paquete presupuestal para 2019, se negociará precisamente en la segunda mitad de este año. Por lo que es de esperarse que, dado que no habrá cambios mayores en los ingresos de la federación, los egresos deberán ser muy parecidos.

Será entonces 2019 un año de transición. Muy similar en lo económico a 2018. Aunque con un presidente nuevo, en términos efectivos el gobierno de López Obrador no empezará sino hasta 2020. Cuando el gasto público traiga efectivamente, todo el sello del gobierno del nuevo presidente.

Eso se refleja en los cálculos de expectativas económicas para México que hacen las principales agencias. Descuentan un 2018 con un crecimiento de 2.5 por ciento del producto interno bruto (PIB) y para el próximo año estiman un crecimiento ligeramente superior, 2.8 por ciento. De acuerdo a pronósticos de la OCDE.

Es decir, México seguirá adelante después del 1ro de julio y no esperemos grandes cambios en lo inmediato, más bien un 2019 inercial.

Twitter: @Israel_Macias

JJ/I