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Gigantesca acción en micro superhéroes

Personalidad. El actor Paul Rudd repite como protagonista y guionista de Ant-Man y la Avispa, que llega a los cines del país este jueves. (Foto: Especial)

En la primera entrega, Ant-Man demostró que un superhéroe del tamaño de un insecto puede salvar al mundo. Pero ahora, el conflicto es más personal en la secuela que se estrena este jueves: Ant-Man y la Avispa.

Scott Lang se debate entre cumplir las misiones como superhombre o asumir su rol de padre de familia.

“Es genial cuando empiezas a escribir el guion de una película y no tienes que detenerte a explicar nada, ya que muchos de los aspectos del personaje se conocen. No necesitas dedicar demasiado tiempo a establecer esas cosas”, dijo el protagonista y guionista de la cinta, Paul Rudd.

Como es habitual en el Universo Cinematográfico de Marvel (UCM), al que pertenece Ant-Man, las películas se conectan entre sí: la segunda parte de Ant-Man comienza con Lang en arresto domiciliario, después de los hechos ocurridos en Capitán América: Civil War.

Al tiempo que enfrenta las consecuencias de sus actos entra en conflicto por la idea de aceptar una nueva misión como superhéroe, de la mano de los científicos Hank Pym (Michael Douglas) y Bill Foster (Laurence Fishburne), de Janet Van Dyne (Michelle Pfeiffer) y de Hope (la Avispa, interpretada por Evangeline Lilly).

“Me encantan las circunstancias extraordinarias que debe enfrentar: se encoge, vuela sobre otras hormigas, entra en reinos cuánticos y muchas otras situaciones potencialmente mortales”, contó Paul Rudd.

“Una de las cosas que siempre intenté sostener es la forma de lidiar con las cosas con cierto sentido del humor, sin que la amenaza genere una gran inquietud, sino manteniendo una actitud despreocupada. Creo que esa sensación se transmite a los espectadores”.

El actor confesó que antes de rodar la primera cinta se inspiró en alguien para su rol.

“Es algo extraño. Antes de empezar a interpretarlo, pensé en Bill Murray haciendo cualquier cosa en el cine. Él transmite esa forma de ser, que parece no tomarse las cosas en serio, y a mí me fascina eso. Creo que es genial”.

En la secuela repite como director Peyton Reed, quien se entiende a la perfección con Paul de que el humor es esencial.

“Queríamos crear algo original dentro del género. Quisimos lograr momentos divertidos, pero conmovedores, y con efectos visuales impresionantes”, explicó Peyton.

En esta segunda parte aparecen grandes actores como Douglas, Fishburne y Pfeiffer, lo cual emocionó al protagonista.

“Fue maravilloso, debo confesar que, aunque he hecho varias películas, no pude evitar estar en el set y pensar ‘cielos, están Laurence Fishburne, Michael Douglas y Michelle Pfeiffer. Y están todos hablando entre sí. ¿Cómo llegué aquí?’. Es algo sensacional”, aseguró Paul.

Corte familiar

“Nuestra película es un poco diferente, hasta cierto punto de las películas que hay de Marvel, pero claro que sigue teniendo esos grandes y locos efectos especiales usuales; es una historia de familia, de padres e hijos”, comentó Paul Rudd.

“Establecimos desde el principio que la película tenía que ser aun más desatada, que tuviera una locura con los visuales y que mostrara el crecimiento de este mundo, quisimos hacerlo lo más dinámico posible; incluso los trajes”.

Respecto a la conexión que existe entre el talento y el director, decidieron llevar un mensaje más allá de la acción. El actor habló de la importancia de estar en la cinta.

“Crear esperanza y pasión es crucial dentro de una película de superhéroes, sé que muchas películas quieren crear eso, nosotros buscamos esa simpatía con los personajes. Quiero hacer sentirle algo a la gente, algo bueno y lo tengo presente todo el tiempo, es muy importante para nosotros”, destacó Peyton.

Es la primera película que Paul Rudd realiza para todo tipo de público, en el que los niños también están incluidos y le gusta, incluso el actor resaltó que tiene algo en común con su personaje.

“Tengo un dilema en este filme sobre cómo puedo ser un buen superhéroe y a la vez seguir siendo un buen papá porque no son fáciles las dos cosas”.

“Tengo que trabajar, viajar fuera del país y a veces me pierdo eventos y me siento culpable de esto, habla la historia, en eso se relaciona con la vida real”, finalizó.

Sabías que…

  • Antes de rodar la secuela de Ant-Man, Paul pasó un año en entrenamiento físico, hacía ejercicio, dormía a horas específicas, comía pocos hidratos de carbono y se despidió de la azúcar y el alcohol
  • El vestuario de Ant-Man aún le resulta incómodo y caluroso y ponérselo le llevó una hora por lo aparatoso del traje
  • Antes de rodar Ant-Man y la Avispa Paul volvió a leer los cómics de Ant-Man y el Universo Marvel para meterse de lleno al personaje
  • Ant-Man y la Avispa es una película que opta bastante por ir a su estilo y la conexión con el resto de Los Vengadores prácticamente se limita a algunas bromas relacionadas con la amistad que une a Lang con el Capitán América
  • Hay dos escenas postcrédito, no te salgas antes de tiempo
  • Los críticos aplauden las escenas de acción y los efectos especiales

JJ/I