Andar loco en technicolor es lo de hoy

Technicolor

Marlango

Marlango lo que hace es música cinematográfica, influenciada por los musicales de Broadway, con guiños a George Gershwin, pero se establece en el pop elegante y fino que por momentos puede escalar al rock (si lo dudan escuchen Gracias por venir y Lo que no te digo). Technicolor tiene una riqueza de colores que lo hace entrañable, los arreglos de metales obligan a imaginar a la banda en un bar de jazz en medio de la carretera, oigan El veneno con esa idea. Leonor Watling es histriónica, como pocas interpreta, matiza, seduce (Baila te puede rendir, Los desertores se lanza al vacío y a la tristeza). Sólo molesta la presencia de David Aguilar en Un momento perfecto, no ayuda ni hace crecer el tema, lo demás es una bomba al corazón. #Buenazo

CALIFICACIÓN: SUBE EL VOLUMEN

Cambio estacional

Odisseo

Odisseo es una banda que hace buenas canciones, sus melodías son agradables, pegajosas, su música tiene personalidad, al igual que la voz del cantante Juan Pablo López, pero les sobra melcocha, sus letras son monotemáticas, aunque se salvan canciones como Calor al corazón, más por su forma que por la letra. Si les quitarán los teclados, quedaría un sonido muy pop rock ochentero menos cursi, por ejemplo, Belleza americana que es muy The Cure, tendría más fuerza sin sus adornos de teclado. Invencibles es buena, pero recargada, Lo que quieras de mí es muy new wave, pero cansa. Puro sentimiento encontrado provocan. Ya los veremos en el Coordenada a ver qué tal. #ElTristeTodosDicenQueSoy

CALIFICACIÓN: CONSUMA CON MODERACIÓN

Fuerza ancestral

Reyno

Como Odysseo, Reyno está atrapado en una estética donde sobran los teclados y la miel, pero sus ideas musicales resultan interesantes. Reyno es una banda más atmosférica y profunda en términos sonoros y la presencia de las guitarras los salvan en temas como Horizonte, Rayo de luz y La suma de todas las cosas, quizá la mejor de todo el disco. Mantener un tono y pocos matices los hace aburridos, planos, hay que ser fan para lograr escuchar Fuerza ancestral dos o tres días seguidos o más. Su pop neopsicodélico que explora el folk (Fuerza ancestral, Hasta el último día), comienza a exigir variantes, más riesgo, sólo así dejarán de sonar limitados y complacientes. #TuPuedesManito

CALIFICACIÓN: CONSUMA CON MODERACIÓN

Elephants on acid

Cypress Hill

Después de escuchar este disco, aumentan las ganas de ver a Cypress Hill en el Festival Coordenada. Roqueritos, aprendan de estos raperos a explorar un nuevo campo semántico sonoro sin perder la esencia. A su sonido incorporaron texturas de la India y Medio Oriente, es obvio en Band of gypsies, pero algunas cuerdas y percusiones están regadas en todas las canciones, pero el trabajo vocal, la pausa de su fraseo, se mantiene como su sello, además abrieron su espectro al trip hop (Jesus was a stoner), al pop sesentero (Oh na na) como apropiación del sonido Bollywood y sus atmósferas siniestras están en Falling down, quizá lo mejor del álbum junto a Reefer man. Aprendan Migos, Lamar y traperos: Aquí están sus papás. #AndanBienLocos

CALIFICACIÓN: SUBE EL VOLUMEN

Camas separadas

Daniela Spalla

Ya había lanzado como sencillos la mitad del disco y se había dibujado las intenciones retro de Daniela Spalla, pero el disco completo nos muestra que su nivel musical creció como la espuma y se toma imperceptibles riesgos que hacen adictivas sus canciones. Estábamos tan bien, Los de siempre y Canción decente evocan a cantantes francesas y españolas de los años 70, son canciones bien construidas, desprovistas de drama azotado, reflejan un dolor superado, son nostálgicas y bonitas, se meten por el oído hasta estremecer el cuerpo. La mejor de todas es Volverás, un tema doloroso, fantasmagórico, con una letra honesta, muy cinematográfica. Daniela es elegante, fina, sutil, pero arrasa. #GraciasDaniela

CALIFICACIÓN: SUBE EL VOLUMEN

@tuamigoFranco

da/i