Quinto Patio

Hay empresas a las que las autoridades, pareciera, les agarran ¿cariño? Y el ¿cariño?, se demuestra de muuuuuuchas maneras. Ahí está el caso de una de las empresas consen del gobernador Aristóteles Sandoval, de Tisa (Tarjetas Integrales, SA de CV), que desde 2013 hasta el año pasado administró más de mil milloncitos del transporte público. Sin contar que se le asignó un contrato que vence en 2024 y que es para el prepago. ¿Cuánto cobrará? Arribita de 524 millones de morlacos.

Creada en 2001, uno de sus socios era Jorge Humberto Higareda Macías, de la Alianza de Camioneros, que luego vendió sus acciones. El presidente de la empresa es Fernando Palacio Landa. Los servicios de la compañía empezaron en la administración de Francisco Javier Ramírez Acuña, continuaron con Emilio González Márquez y en el sexenio de Aristóteles Sandoval prosiguieron y hasta se le avaló que siga con el negocio de manera transexenal. Los bienevales y transvales son buen negocio. ¿Hay o no cariño?

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Hoy empiezan las nuevas o renovadas administraciones de los 125 municipios de Jalisco. Desde hoy los presidentes municipales, regidores, síndicos y titulares de las respectivas comisarías tienen bajo su responsabilidad quizá el más grave problema en Jalisco: la inseguridad pública, al mismo tiempo que deben cuidar los servicios públicos bajo el control de los ayuntamientos. Pero el aumento de homicidios, asaltos, robos, heridos, extorsiones, etcétera, pone en primer lugar tomar decisiones que apunten hacia la paz social, la justicia, el respeto de los derechos humanos, el derecho a vivir sin miedo, a que sean respetadas las vidas y los bienes de las familias.

En los discursos de los alcaldes que ayer rindieron protesta, en las distintas sesiones solemnes realizadas, con mayor o menor énfasis apareció la preocupación sobre el tema de la inseguridad pública, acompañada de la promesa reiterada de que la administración municipal entrante pondrá su mejor esfuerzo en mejorarla. Ya no se trata de pertenecer o no a un partido político distinto, de contar con tal o cual ideología, liga a grupo político o creencia de cualquier tipo. Ahora son funcionarios y deberán ofrecer el mejor de los argumentos: resultados. Desde hoy.

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Después de rendir protesta, el nuevo alcalde tapatío, Ismael del Toro, prometió que la seguridad será el tema número one a atender. Se destinarán “todos los esfuerzos y todos los recursos” que sean necesarios, dijo. Auuuuuque en redes, un día antes, le tundieron los cuestionamientos por la designación de Isaías Domínguez como nuevo sheriff, pues tiene antecedentes en la Comisión Estatal de Derechos Humanos por su vinculación con la tortura a tres personas cuando pertenecía a la División de Secuestros y Extorsiones. Además, analistas advierten que el proyecto anunciado en campañas plantea mucha inyección de dinero, poco análisis de fondo y no esboza un plan integral para resolver la problemática de inseguridad en la ciudad.

Al Pope lo acompañaron personajes de la clase política: el gobernador electo Enrique Alfaro (“no puedo sentirme más tranquilo” de saber que Ismael recibió la estafeta, escribió); el gobernador Aristóteles Sandoval; su “jefe” (como lo llamó Del Toro), el coordinador nacional de Movimiento Ciudadano, senador Dante Delgado; el titular del Poder Judicial, magistrado Ricardo Suro; el líder del Grupo UdeG, Raúl Padilla, y una larga lista de presentes que no cabrían en el patio de esta vecindad.

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Mientras la grilla andaba de gala en las respectivas tomas de protestas de los nuevos alcaldes y regidores, ayer el Tribunal Electoral del Estado de Jalisco (TEEJ o Triejal, para los compas) le quitó una curul al PAN y se la dio al PRI para la siguiente Legislatura. El desbancado es el ex dirigente blanquiazul Hernán Cortés Berumen. ¿Y el beneficiado? Nada menos que el tricolor Manuel Alfaro Lozano, ex secretario privado del gobernador Aristóteles Sandoval.

Nada de presiones ni de llamadas, dijo sobre los rumores en los corrillos del tribunal el titular del organismo, Rodrigo Moreno Trujillo. Ya veremos si la Sala Regional y la Superior lo sostienen en caso de impugnaciones o le dan revés, como ha ocurrido otras ocasiones. Una curul en disputa, podría titularse la crónica.

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JJ/I