230 años de Sabine

Al abogar por la consideración que, en una visión general del magnetismo de la tierra, parece deberse a los puntos en cada hemisferio que forman los centros de los sistemas de líneas isodinámicas, y son en sí mismos puntos de mayor Fuerza, –y al círculo o curva que abarca la tierra y une los puntos en cada meridiano geográfico donde la fuerza magnética es más débil–, estoy lejos de desear que se les atribuya una importancia indebida.

Edward Sabine, Contributions to Terrestrial Magnetism n. 7, R. and J. E. Taylor, Red Lion Court, Londres (1846), p. 255  

Ahora que han proliferado grupos que insisten en la planitud de la Tierra es pertinente revisar los trabajos realizados por sir Edward Sabine (1788-1883), erudito irlandés (Dublín) quien hizo importantes aportaciones al estudio del magnetismo terrestre y la influencia de la actividad solar en el mismo, y además de dichos trabajos geofísicos también se dedicó a la astronomía y emprendió expediciones señeras durante las cuales realizó cuidadosos experimentos con un péndulo de precisión para determinar la forma de la Tierra al registrar con los parámetros de la oscilación la aceleración gravitacional.

Se formó en la Royal Military Academy de Woolwich, Londres y fue comisionado a la Artillería Real sirviendo en Gibraltar y Canadá; en 1818 se une a la expedición de sir James Clark Ross (1800-1862) para encontrar el paso Norte-Oeste y en 1819-20 es parte de la expedición ártica dirigida por William Parry (1790-1855). Para 1826 colaboró en la investigación sobre magnetismo terrestre en Gran Bretaña realizada por el eminente matemático Babbage, y él continuó su propia prospección que le llevó a anunciar el 6 de abril de 1852 que el ciclo de 11 años de las manchas solares era “absolutamente idéntico” al ciclo geomagnético, ello implicó el inicio de los estudios de las interacciones del sistema Sol-Tierra.

En el ámbito de la técnica astronómica colaboró con sir John Herschel (1792-1871) y el gobierno francés para determinar la precisa diferencia de longitud entre los observatorios de Greenwich y París utilizando señales de cohetes. Quien también aportó a la ornitología y al conocimiento de los volcanes hawaianos nació en Dublín un 14 de octubre de 1788.   

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