INICIO > OPINION
A-  | A  | A+

Educación cívica, lejos de lo necesario

Hace unos días tuve la oportunidad de platicar con el joven senador Samuel García Sepúlveda en Puerto Vallarta. A sus 30 años es abogado y financiero, máster en derecho público y doctor en política y administración pública. Intercambiamos conceptos entre educación y política, coincidiendo que en las escuelas deben enseñar valores cívicos de una manera que lleve a la realidad a nuestros jóvenes; una educación política. Buscar la manera de concientizarlos en principios básicos para una mejor comprensión de la política. Insistir en desaparecer el fuero a los servidores públicos o al menos regularlo, ya que algo que inició con la finalidad de proporcionar seguridad a los políticos para ejercer el poder a favor del pueblo se convirtió en una herramienta para que corruptos actúen ilícitamente sin poder ser juzgados. Eliminar la pensión a los expresidentes y familias que le cuestan al pueblo cerca de 50 millones de pesos mensuales, por los excesos que se cometen alrededor, con el pretexto de brindar seguridad. Controlar los gastos que se generan alrededor de las imágenes de los políticos al presumir las obras que finalmente debieran ser una obligación, ya que se realizan con el dinero del pueblo.

La cuestión es encontrar la manera de educar para que el poder no corrompa al servicio público y la única manera de hacerlo es mediante la transparencia y combatiendo la impunidad, dando seguimiento al patrimonio de los políticos y sus familiares antes y después de su gestión. Aplicar sanciones como la muerte civil que no es otra cosa que vetar de la vida política a los corruptos con la consecuente deshonra familiar como ocurre en algunos países asiáticos. La plática con el joven legislador, que fue el complemento a su conferencia donde expresó que en México hay muchas leyes que son buenas pero no se aplican y otras que son tan malas que se usan a diario en perjuicio de la propia ciudadanía resultó ser una motivación para enseñar civismo de otra manera a los jóvenes principalmente.

En la entrada de la Universidad de Sudáfrica está escrito El colapso de la educación es el colapso de la nación y en México, únicamente 17 por ciento de los jóvenes estudian una licenciatura y apenas 1 por ciento tiene un grado de maestría o doctorado, por lo que la manipulación política resulta muy fácil. Si no cambiamos la historia educativa futura de nuestro México que se ubica en los últimos lugares de los países de la OCDE, colapsaremos como nación en los próximos cinco años. Erradicar la corrupción y la impunidad, provocar la transparencia y la honestidad, debieran ser las principales preocupaciones de la formación humana de una sociedad.

[email protected]

@Saucedodlallata

JJ/I