Súper Cuba

En la búsqueda del  “desarrollo”, al cual le atribuyen palabras tan ambiguas como “progreso”, “evolución”, “crecimiento”, los Estados “sub-desarrollados” o “en vías de desarrollo” (descripción incluso más poética) se obstinan en copiar recetas de “casos de éxito”. Es decir, volteamos a ver a “las grandes potencias” y aspiramos a emular su “receta de desarrollo” aspirando a algún día ser como nuestro hermano mayor.

La avalancha de comillas busca resaltar la absurdidad del sueño global titulado “desarrollo”. Lo digo con certeza. La realidad es que todos los modelos exitosos (inclúyase aquí el modelo capitalista de EU, el efecto panda en China, el modelo Genko Ketai o Vuelo de Ganso, el modelo Nórdico (…)] tienen algo en común, forjaron su propia receta.

En lo anterior encontrarán, la línea entre el desarrollo y el subdesarrollo, existen países que generan sus propias condiciones y otros que copiamos la receta de Mc Donalds esperando algún día renacer como las cenizas y volar más alto que el vecino.

Estoy cierto que existen muchos otros factores, como los organismos internacionales, entiéndase Fondo Monetario Internacional, Banco Mundial etcétera. A pesar del pesimismo el objetivo de esta columna no es remarcar las razones por las cuales un país fracasa, para ello me permito recomendarles un excelente libro al respecto: Por que fracasan los países, escrito por Daron Acemoglu y James A. Robinson.

Mi intención es anunciarles a la nueva potencia emergente, un viejo conocido por su sueño comunista: Cuba. La era pos-fidel será el periodo de consolidación para la isla más codiciada del Caribe. Criticada por el capitalismo y adorada por todo aquél que ve más allá de un billete de 100 dólares.

Si no me creen les dejo estos datos: En la primera visita del gobierno español a Cuba después de 30 años, se le aportó al gobierno cubano  alrededor de 2 millones de euros, asimismo, se diseñó un programa de visita que lleva un foro empresarial de cientos de inversionistas que ven a Cuba como una opción viable para hacer negocios. China por su parte le ha abierto una línea de crédito de 124 millones de dólares.

Por último, y en palabras de Rodrigo Malmierca, ministro cubano de Comercio Exterior y la Inversión Extranjera, “la sexta versión de la cartera de negocios en Cuba incluye 168 nuevos proyectos, para un total de 11 mil 609 millones de dólares. Aunado al poderío económico la receta cubana incluye el eslabón más importante para la transformación (no hablo de la cuarta transformación de papel que nos cantan día con día) “la identidad”.

“Lo que transforma una población demográfica en comunidad espiritual, un país en nación, es la creación de una cultura, una cosmovisión, un modo de sentir y ver el mundo, de ser y estar con él, creado, compartido y gozado.” Miguel Laborde (historiador chileno).

[email protected]

JJ/I