De todos los dolores

The pains of growing

Alessia Cara

Pensar que a los 22 años alguien puede hacer discos poderosos y retadores, ofrece esperanza. Lo mejor de The pains of growing es la voz de Alessia Cara, quien puede ir del rap al blues sin inmutarse, puede de ir del pop simple y pegadizo al reggae y el soul. Girl next door y Nintendo game recuerdan a Alicia Keys. Este disco es una transición hacia la adultez, pero con resistencia a dejar la niñez como lo muestra My kind y Trust my lonely, en las letras hay drama de eso que se aprende en la experiencia, lo que duele crecer, falta personalidad, pero está emergiendo. #NoDuele

CALIFICACIÓN: SUBE EL VOLUMEN

Delta

Munford & Sons

Quien se alejó de Munford & Sons por considerar demasiado intimista y aburrido su estilo folk, debe de inmediato darle play a Delta, el primer disco donde transforman su sonido y lo llevan a las nubes. Sin perder su esencia, la banda se sirve de elementos electrónicos para abrir su espectro a sonidos más espaciosos (Guiding light, Darkness visible), dinámicos (Rose of Sharon) y atmósferas sutiles de dream pop (Woman). El cuarteto vuelve a coquetear con sonidos indie (Slip away), pero orientó el disco a paisajes abiertos, pero no coloridos; el cierre con Delta es una estocada emocional. #HijosDeSu

CALIFICACIÓN: SUBE EL VOLUMEN

Shiny and oh so bright vol.1

Smashing Pumpkins

Si ya Billy Corgan lanzó un aburrido disco cantado con piano, llevar a Smashing Pumpkins al pop no es tan dramático, pero enfrenta a los fans a la realidad: Corgan cedió y busca nuevos públicos con canciones pop y perdió el rumbo y la ambición, aunque el tema abridor (Knights of malta) es pretensioso con sus violines y coros gospel. Punto a favor, hay una huella sonora, una marca, en el trabajo de guitarras y la voz de Corgan. Solara rompe con la inercia de cuatro temas digeribles con los que inicia el álbum. Alienation hace un atisbo de la parte orquestal que llevó a la banda al éxito y Machin’on es lo más cercano a lo que eran. Los perdimos. #TriturenALaCalabaza

CALIFICACIÓN BAJO TU RIESGO

The 1975

The 1975

The 1975 es lo más cercano a Tokio Hotel que conozco. En su primer disco de 2013 había atisbos de rock, ahora es un proyecto popero al estilo de Imagine Dragons y Maroon 5. Este disco cuestiona la relación que tenemos con la tecnología, acude al dance (Tootimetootimetootime), agregan auto tunes para sonar traperos (I like America & America likes me), rapean (Sincerity is scary) y terminan con un corte de aires ochenteros en It’s not living (If it’s not with you) que parece canción de musical de Disney. No es una gran obra, las letras parecen un cómic de secundaria, es un intento de abarcar todo sin apostar a nada. #DóndeEstáElChiste?

CALIFICACIÓN BAJO TU RIESGO

SENCILLO

Te esperé

Jesse & Joy

Lleva días en la radio, pero no tenía que dejar pasar la oportunidad de hablar de un nuevo clásico de Jesse & Joy, un par de hermanos que con cada disco elevan el nivel de las posibilidades del pop. La progresión del tema sigue la lógica del góspel, sobre la cual hay influencia del country, los arreglos de cuerdas son delicadamente intensos. La voz de Jesse detrás de Joy en el coro ofrece un espacio al dolor, al drama y la letra es entrañable por su sencillez. Estamos ante una verdadera obra de arte pop. #Grandes

CALIFICACIÓN: SUBE EL VOLUMEN

@tuamigoFranco

da/i