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Se come un ‘flan’

(Foto: Especial)

Saúl Canelo Álvarez cerró el año con una corona más, la cual lo pone en la élite de los mexicanos tricampeones mundiales.

Anoche el pugilista jalisciense derrocó de fácil manera al campeón mundial de peso Supermediano de la Asociación Mundial de Boxeo (AMB), Rocky Fielding, apenas en tres asaltos sobre el mítico escenario del Madison Square Garden, dominando una pelea en la que Saúl ejerció hegemonía por la vía del nocaut.

Canelo derribó a su rival en cuatro ocasiones, y dejó en evidencia la poca capacidad del contendiente inglés, que poco pudo hacer ante las combinaciones del tapatío.

Fielding no soportó los severos golpes que Álvarez le propinó, y fue capaz de soportar apenas tres rounds, cayendo a la lona desde el primer episodio, para repetir esto en el segundo y tercer asalto posteriores.

Desde el primer episodio, Rocky salió a aprovechar su distancia de ventaja, y por lo menos la primera parte del primer asalto logró conectar, aunque no contundente, en el rostro del tapatío, pero Canelo fue paciente, halló el momento desde la última parte del primer round, encontrando la manera de bajar al inglés, quien acabó por dolerse de las combinaciones que el de Guadalajara le ejecutó.

Ni la altura ni largueza de brazos ayudó a la ventaja para el inglés; Canelo supo enfrentar las desventajas con el boxeo en corto, propinándole contundentes derechazos que hicieron a Rocky doblarse en cuatro ocasiones, la última ya sin posibilidades de seguir la pelea, misma que el réferi decidió terminar luego de haber caído en menos de 30 segundos en dos ocasiones.

Primero fue un izquierdazo al hígado, después un derechazo a la mandíbula que lo mandó a la lona y el que diera el gane al tapatío.

El espíritu propositivo y de intercambio de golpes que planteó desde el inicio el inglés acabó siendo su derrota, al hallar Saúl la manera contundente de hacerle daño.

Álvarez salió a hacer su propia pelea ante un joven pugilista que apenas ayer peleó por vez primera fuera de su país. Un saco de box fue lo que representó para el tapatío, quien con el mínimo esfuerzo derrotó a un limitado contendiente y terminó como nuevo campeón de los Supermedianos de la AMB.

da/i