INICIO > OPINION
A-  | A  | A+

Salcido, por el último suspiro

El próximo 2 de abril, Carlos Arnoldo Salcido cumplirá 39 años de edad, y ha decidido que aún tiene condiciones para competir en un deporte de alto rendimiento como el futbol profesional.

Cuando el jugador oriundo de Ocotlán, Jalisco, anunció su salida del Club Guadalajara el pasado 28 de diciembre de 2018 por diferencias con el cuerpo técnico de José Saturnino Cardozo, dejando abierta él la posibilidad de integrarse a cualquier equipo que deseara sus servicios, en realidad pocos o nadie esperaba que se abriera una puerta para continuar su carrera.

Sin embargo, cuando menos se esperaba, casi ya para el cierre de registros, Veracruz sorprendió al dar a conocer que contrataba al defensa con tres mundiales jugados y una brillante carrera en Europa, sobre todo en el PSV Eindhoven de Holanda. El clamor general es de crítica hacia la decisión de Salcido por aceptar la oferta de integrarse a un equipo como el principal condenado a descender a corto plazo.

Por eso la gran pregunta es ¿por qué un atleta no sabe retirarse a tiempo? Salcido ya logró todo lo que un jugador mexicano anhela: fue campeón de liga, jugó en Europa, y participó en tres mundiales. Lo único que le faltó, como cualquier otro mexicano, fue un título de copa del mundo. Obvio, a estas alturas no lo va a conseguir, y a lo más que puede aspirar es a ser parte de la salvación del Veracruz.

Si se revisa la carrera de otros futbolistas, también se verá que tuvieron un epílogo similar. Hugo Sánchez, uno de los grandes del Real Madrid de los 80, terminó peleando por no descender con Celaya. Jared Borgetti, un goleador de época, concluyó con León en la Liga de Ascenso. Omar Bravo, el goleador histórico de Chivas terminó en la Tercera División de Estados Unidos.

¿Qué empuja a los deportistas a aferrarse, a resistirse a aceptar el final? En el caso de Salcido, las razones pueden encontrarse en su orgullo de demostrarle a quienes ya no lo quisieron en Chivas a que aún tenía mucho por ofrecer.

Yo, la respuesta la encuentro también en aquel diálogo que sostiene Apollo Creed con Rocky Balboa en Rocky 4, cuando el primero decide volver del retiro para enfrentar a Iván Drago, y dice: "Personas como tú y yo nacemos con un instinto asesino, necesitamos una batalla que pelear, de lo contrario morimos en un medio pasivo".

Salcido, pues, vivirá una batalla más a sus casi 39 años de edad.

@ofares72

JJ/I