INICIO > OPINION
A-  | A  | A+

Nada nuevo bajo el sol... pero sí bajo la tierra

El 6 de febrero fue elegido como nuevo rector general de la Universidad de Guadalajara Ricardo Villanueva. La novedad es precisamente la continuidad del proyecto del grupo que mantiene el poder dentro de la UdeG. Se trata del primer rector no emanado de la Federación de Estudiantes de Guadalajara (FEG), sino de la Federación de Estudiantes Universitarios (FEU), una organización promovida y auspiciada por el entonces rector, Raúl Padilla, para restarle importancia a la vieja FEG. Tanto la FEG como la FEU jugaron el mismo papel de ser escuela de cuadros, trampolín estudiantil de donde se han lanzado los directivos medios, regionales o generales de la universidad, siempre y cuando garanticen la continuidad del mismo proyecto que sirve a los intereses, directrices y propósitos del licenciado Raúl Padilla. De fondo: novedad, cambios, para que todo siga igual. Con Enrique Alfaro, una relación ya aceitada, en la que el gobernador propone “trabajar con una relación de sano respeto”, con el licenciado y sus representantes en turno. De eso se trata, del gatopardismo al estilo Jalisco.

Desaparecidos

El subsecretario de Derechos Humanos, Alejandro Encinas, ha dado los primeros pasos para emprender el trabajo en torno a las personas desaparecidas. En el país, los desaparecidos suman alrededor de 40 mil, se considera que existen más de mil 100 fosas clandestinas sin explorar y unos “26 mil cuerpos sin identificar en los institutos forenses de los estados”. Sobre el perfil de las víctimas, predominan los jóvenes de entre 17 y 29 años, generalmente de escasos recursos. Entre 8 y 10 por ciento de los desaparecidos, son migrantes. (Mural, 5 de febrero de 2019).

Guadalajara y Tlajomulco están entre los 15 municipios del país con mayor registro de homicidios dolosos en el arranque del año. Sobre cuerpos sin identificación forense, no olvidemos los tráileres itinerantes que nos alertaron sobre la incapacidad de las autoridades para tratar el problema, informar al respecto y proponer una estrategia clara de qué hacer con el subregistro e identificación de cuerpos. El gobierno de Jalisco no tiene aún claro ni definido cómo atenderá la “alerta de violencia contra las mujeres”, por ejemplo. Parte del problema es que hay subregistro de la problemática y en parte se debe a que no se actúa con determinación frente al problema, y menos se tiene claro que el crimen organizado también está involucrado.

Obviamente no basta que se tenga un buen registro sobre la problemática de la violencia contra las mujeres o la desaparición de personas o del complejo problema que se genera con la comisión de delitos perpetrados por el crimen organizado contra dirigentes sociales o personas, en las comunidades más vulnerables e indefensas. Por ello es muy importante que se atienda integralmente ese cúmulo de problemas asociados bajo una estrategia bien definida por el gobierno local y con una adecuada coordinación con las políticas nacionales a fin de que la cooperación sea eficaz.

Considerando la problemática nacional y estatal en torno a desapariciones, feminicidios y violencia asociada, podríamos concluir que un gran reto para los nuevos gobiernos es atender el problema, bajo las diversas modalidades que presenta, a fin de que no se incrementen el trato violento a mujeres y niños, las muertes ni las desapariciones y mucho menos el reclutamiento forzado de personas a las que el crimen organizado obliga a cometer delitos. Es claro que se necesita alinear las estrategias nacional y estatal, así como definir de qué manera pueden contribuir en una estrategia integral las autoridades municipales a fin de que no se pierda o diluya la responsabilidad que tiene cada nivel de gobierno sobre el problema.

Un buen comienzo podría ser que se escuche a las organizaciones, redes e instituciones que han trabajado desde hace años en torno a estos problemas.

[email protected]

da/i