Alfaro: ¿aplausos o abucheos?

Bastante difusión –y motivo de reclamos de la oposición– ha generado la revelación de un documento membretado con el nombre de Morena donde sobresale la palabra “Confidencial” y la frase “Sólo para uso interno”, y que como identificación dice: “Manual para eventos del Señor Presidente Andrés Manuel López Obrador en Estados de oposición”.

En el rubro de “Ambientación” sobresale el punto número dos que generó no sólo la preocupación, sino la indignación de los partidos de oposición, particularmente los que gobiernan algún estado, y que a la letra dice: “Insistir a los asistentes convocados que al anunciar la intervención del Mandatario Estatal de oposición ES OBLIGATORIO (mayúsculas y negritas en el original) emitir sonidos y gritos de desaprobación (abucheos, silbatina, consignas partidistas, etc.)”.

Quizás todo quedaría en fake news a no ser porque en los hechos, durante la presencia de López Obrador en estados gobernados por partidos de oposición los abucheos, las silbatinas y los gritos de desaprobación hacia los mandatarios estatales están a la orden del día. Esa experiencia la han enfrentado los gobernadores de Campeche, Alejandro Moreno (PRI); de Tabasco –hoy ex, Arturo Núñez (PRD)–; de Michoacán, Silvano Aureoles (PRD); de Guerrero, Héctor Astudillo (PRI); de Hidalgo, Omar Fayad (PRI); de Oaxaca, Alejandro Murat (PRI); de Coahuila, Miguel Ángel Riquelme (PRI); de Zacatecas, Alejandro Tello (PRI); del Estado de México, Alfredo del Mazo (PRI); de San Luis Potosí, Juan Manuel Carreras (PRI); de Tlaxcala, Marco Antonio Mena (PRI), y de Baja California Sur, Carlos Mendoza Davis (PAN).

La gobernadora de Sonora, Claudia Pavlovich, del PRI, sorteó el abucheo al no ser mencionada por la maestra de ceremonias y hacer uso de la palabra inesperadamente, echándole porras a López Obrador y solicitándole su apoyo por las altas tarifas del servicio eléctrico.

Pero no sólo están como evidencia de la coincidencia entre el documento acreditado a Morena y los hechos atestiguados en cada una de estas visitas presidenciales, sino que también circula en redes sociales un video donde se observa a un sujeto con chaleco café y en la espalda el logotipo del gobierno federal y el texto “Gobierno de México”, gritando consignas contra el mandatario de Hidalgo, Omar Fayad. “¡Fuera Fayad, fuera Fayad, fuera Fayad…!”, se escucha claramente que grita y luego un “¡Cállate!”, cuando habla el mandatario.

Con estos antecedentes tenemos que preguntarnos: ¿qué escenario le espera a Enrique Alfaro Ramírez el próximo fin de semana cuando estará en Jalisco López Obrador, luego de los enfrentamientos verbales y las diferencias con el mandatario federal y su gobierno? ¿Será por eso que le ha bajado de tono a sus críticas al lopezobradorismo y hoy hasta paga publicidad en Internet donde le reconoce y lanza porras a Andrés Manuel por su compromiso de concluir este año la Línea 3 del Tren Ligero? ¿Será que de ser abucheado, AMLO saldrá en su defensa como lo hizo con Héctor Estudillo en Guerrero o dejará que se desahogue el coro en contra del gobernador?

Ayer en su rueda de prensa mañanera, López Obrador declaró que si los gobernadores no quieren exponerse a los abucheos, puede visitarlos en privado, en palacio de gobierno, y consideró que esas expresiones populares “son un desahogo de la gente”, negando que detrás de eso esté su partido Morena.

Ante la visita de AMLO, Enrique Alfaro tiene tres opciones: 1. No acudir a los eventos públicos; 2. Pedir que no lo mencionen o no hacer uso de la voz, como el caso de Javier Corral, en Chihuahua; y 3. Tomar por sorpresa el uso de la palabra y elogiar al presidente, como lo hizo la sonorense Claudia Pavlovich.

No es un escenario fácil para quien advirtió que “no voy a gobernar agachado al presidente”.

ES TODO, nos leeremos ENTRE SEMANA.

JJ/I