Fallas en la gestión de la pandemia, propiciaron exceso de muertes en México

Ante la pandemia de Covid-19, el gobierno mexicano subestimó al virus SARS-CoV-2, centralizó y personalizó las decisiones sobre el manejo sanitario y debido a la política de austeridad del gobierno se “dejó sin recursos al sistema de salud”, concluyó la Comisión Independiente de Investigación sobre la Pandemia de Covid-19.

Durante la presentación de los resultados de investigación sobre el manejo de la pandemia de Covid-19, se señaló que este virus causó daños devastadores como más de 800 mil muertes en exceso, de las cuales cuatro de cada 10 sucedieron por las fallas en la gestión gubernamental. Además, más de 215 mil infantes quedaron huérfanos.

Aunque se reconoció que antes de la pandemia de Covid-19, el sistema de salud mexicano ya tenía problemas serios como falta de inversión crónica y reformas debilitantes, sin embargo, un factor que tuvo una crítica influencia para el exceso de mortalidad es la “defectuosa gobernanza de la crisis”.

En el reporte de la Comisión Independiente se demuestra que “casi 4 de cada 10 muertes en exceso durante la pandemia, sucedieron por fallas en la gestión gubernamental”.

Con la pandemia de Covid-19, las desigualdades aumentaron, la población de bajos ingresos fue la que mayor porcentaje de muertes en exceso tuvo. Además, al subestimar al virus no se realizaron las pruebas diagnósticas suficientes, lo que vulneró a la población más desprotegida, la cual tampoco contó con apoyos económicos.

La Comisión Independiente determinó que la directriz de “quédate en casa” tuvo un efecto adverso, la mayoría de los pacientes llegaron muy tarde a los hospitales, al entender que la atención había que procurarla en casa. En un encierro domiciliario, las atenciones médicas disminuyeron, algunos acudían a consultorio o farmacias privadas, donde con “frecuencia recibieron malas recomendaciones o sobre medicación”.

Sin embargo, en los hospitales las directrices para atender a los pacientes fueron poco claras e insuficientes, 95 por ciento de los fallecidos murieron solos.

Señaló que la comunicación del gobierno no se realizó con base en los manuales o estándares internacionales de comunicación de riesgo sanitario ni basada en evidencia científica disponible, al contrario, hubo “varios episodios de uso engañoso de datos, la justificación pseudocientífica de decisiones políticas, una comunicación basada en información desactualizada, evidencia ignorada en las recomendaciones a la población, la emisión de mensajes anti científicos o supersticiosos”.  

Indicaron que la mala gestión de la pandemia de Covid-19 provocó que la esperanza de vida en México, entre 2019 y 2021, fue de 4 años; la tasa de mortalidad materna aumentó 59 por ciento entre 2019 y 2021; la tasa de defunciones perinatales de 2018 a 2022, creció 18 por ciento; la migración de mexicanos a Estados Unidos pasó de 10 mil traslados en 2017 a 70 mil a finales de 2023; y la alta mortalidad entre adultos jóvenes dejó a más de 215 mil huérfanos de padre o madre.

EH