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EZLN: 32 años de rebeldía y resistencia

 

En la historia mundial de los movimientos sociales de resistencia y rebeldía el Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN) aparece como un caso paradigmático por varios motivos. Voy a referirme a algunos de ellos, aprovechando que el pasado primero de enero cumplieron su 22 aniversario de vida pública.

Como se sabe, su existencia como EZLN inicia una década atrás, y este dato es un primer motivo de importancia, pues no resulta sencillo encontrar en el país movimientos con una base social tan amplia y con tanta creatividad política que hayan tenido vida tan larga. Un segundo motivo de importancia es que ha tenido la inteligencia y la capacidad no solo para resistir a la guerra de diferentes intensidades que ha sostenido el Estado mexicano contra ellos desde 1994 sino que, dentro del contexto de guerra, ha logrado desarrollar sus proyectos de autonomía en educación, alimentación, salud y vivienda, entre otros.

En términos muy generales, el EZLN ha pasado por dos momentos fundamentales: el inicio, cuando las armas (el fuego) fue su palabra y luego cuando optó por la palabra. Posición en la que se mantiene hasta la fecha a pesar de todo. Las armas, lo han dicho ellos mismos, las siguen teniendo, pero no han vuelto a utilizarlas desde que optaron por la vida y en contra de la muerte.

En sus primeros meses de existencia parecía que el EZLN transitaría por las mismas veredas que el Estado mexicano, con toda su experiencia contrainsurgente, había llevado a otros movimientos armados o no. Para que no fuera así resultó clave descentrarse o rechazar explícitamente la lucha por el poder y por tanto a los partidos y los procesos electorales. Posteriormente, ya iniciados sus procesos de autonomía, y consecuentes con su visión anticapitalista, rechazaron también todo recurso o programa gubernamental. Éstos son algunos de sus planteamientos fundamentales y por ello todo el sistema se ha aplicado para que sean los menos comprendidos.

A pesar de todas las criticas en contra, con sus formas de hacer política, han demostrado que se puede vivir mejor, aquí y ahora, al margen del Estado y del mercado capitalista. Por ello, con orgullo afirman que 22 años después las comunidades zapatistas viven en mejores condiciones que antes de su levantamiento, lo que no sucede con las otras comunidades que siguen ligadas a los partidos políticos y que ya ni siquiera saben trabajar la tierra, porque están a expensas de las dadivas del Estado.

Pensado como movimiento generador de ideas que resuenan e inspiran una multiplicidad de lucha, el EZLN no está localizado solo en sus municipios autónomos y mucho menos es, como frecuentemente se afirma, un movimiento aislado. En realidad tiene presencia en todo el país y es un referente mundial.

Con la sencillez y claridad de su pensamiento desde mediados del año pasado han estado llamando la atención a que ante la "tormenta que viene" o que ya está sobre nosotros, debemos apretar el paso. Que no es ya suficiente solo con resistir, sino que la resistencia debemos hacerla con rebeldía y teniendo la autonomía y la autogestión como horizonte.