Optar por las letras

La mayoría de los profesionistas hemos enfrentado la decisión de estudiar lo que nos apasiona o inclinarnos por una carrera que ofrece seguridad laboral y mejor sueldo. Durante los tres años de preparatoria tuve un empleo de medio tiempo en un restaurante suizo, con lo cual satisfacía mis gastos y podía mantener mi primer automóvil; allí descubrí que me gustaba cocinar y sobre todo crear platillos nuevos con lo poco que hubiera. Desde siempre me había gustado leer y en esos mismos años estuve en círculos literarios donde se leía y practicaba la escritura de poesía.

Al escoger la carrera profesional había optado por turismo, convencido de que trabajar en la hostelería era lo mejor para mí y puse en segundo lugar a la literatura, aunque me fascinaba. Llegó el día de entregar el expediente para proseguir el trámite de ingreso y estuve formado, avanzando poco a poco hasta tener a una persona antes de pasar a ventanilla cuando decidí abandonar la fila y hacer nuevos trámites para entrar el siguiente semestre a letras. Por supuesto, fue la mejor decisión, pues allí pasé cinco años intensos de formación, muchas lecturas y grandes vivencias, de 1992 a 1997.

El viernes pasado regresé a la escuela para asistir al foro Sentido e impacto del licenciado en Letras Hispánicas en el contexto del siglo 21, organizado por el Departamento de Letras (CUCSH, Universidad de Guadalajara), y atestigüé cómo el profesor Gabino Cárdenas derrumbó con la fuerza de los datos duros las chocantes y manidas frases que a menudo se espetan cada vez que alguien se decide por las humanidades: “Te vas a morir de hambre”, “de qué vas a vivir”, entre otras de un catálogo amplio de irreflexivas e inútiles reconvenciones. Entre otras, las cifras del Inegi mostraron que 93.4 por ciento de los egresados de Letras tiene empleo, en la educación, el esparcimiento, el comercio y los servicios profesionales, aunque sólo una pequeña parte de estos egresados (1.4 por ciento) han sido emprendedores.

Aun así las cifras derrumban mitos, pero hay mucho por hacer para ampliar el campo profesional y mejorar las condiciones laborales de los egresados. El foro es una señal muy positiva de adecuación a las necesidades actuales, que exigen humanistas competentes, muy especializados y, por supuesto, con actitud de emprendimiento.

@LibracoFP

DN/I