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Juan Pablo Sánchez se la pierde

Sánchez pincha a sus astados y no puede redondear las faenas. (Foto: Especial)

Regresó la actividad taurina a la Plaza de Toros México. Cartel de juventud, con dos mexicanos y un español que ayer lucharon por encima de las condiciones del encierro de Montecristo, diverso en condiciones, soso y débil en algunos casos, lo que impidió que los tres en el cartel se empelaran para una tarde de triunfo.

El hidrocálido Juan Pablo Sánchez estuvo a punto de salir como máximo triunfador, pues de no haber sido por su fallo con el acero, pudo haber salido con dos orejas, una de cada toro, dadas sus dos sobresalientes actuaciones, en las que el joven coleta dio muestra de su mejor herramienta, el temple, además de una madurez taurina y dote de capacidades.

Con su primero de la tarde, Juan Pablo tuvo los mejores momentos. Se inventó una faena a un toro débil que cayó en varias ocasiones, pero que a pesar de las casi nulas condiciones, el empeño y labor del hidrocálido lograron regalar tandas sentidas por ambas manos con la muleta.

Despacio, con temple y calidad, Sánchez pintó detalles que calaron de inmediato en el tendido. Falló con la espada en su primer intento, para que el segundo viaje dejara entera en sitio que le valió una salida al tercio con fuerte ovación.

Con su segundo estuvo en el mismo tenor. El de Montecristo no dio señales de oportunidad, y Juan Pablo estuvo valiente, muy por encima de las condiciones de su toro, robándole derechazos finales que se le corearon fuerte. Detalles de buen quehacer y torería dejó impresos en éste, su último, pero se perdió con la espada larga y corta, echando mano de más de ocho golpes de descabello.

Para el ibérico Miguel Ángel Perera no fue una tarde de triunfo, sus mejores momentos los regaló con el astado que abrió plaza. El español fincó buenos trazos con muleta, en tandas por ambas manos que calaron en la afición. No logró concretar y se fue en blanco, al igual que en su segundo, un toro de nulas condiciones que le obligó a irse con las manos vacías.

El tercero en el cartel fue Diego Silveti, quien no tuvo una tarde prometedora, y es que pechó con un lote que le quedó a deber, aunque tuvo buenos momentos con el que cerró plaza, un toro que vino a menos y con el que no logró conectar del todo en los tendidos. Falló con la espada y se sumó a la lista de manos vacías en la tarde de apertura de la temporada taurina del coso de Insurgentes.

Vibra Bogotá

Una vez que la ley antitaurina dio marcha atrás en Bogotá, Colombia, ayer el matador peruano Andrés Roca Rey abrió de nueva cuenta la Plaza de Toros Santa María. El sudamericano pisó con pie derecho y logró salir a hombros del coso colombian, al cortar dos orejas a su segundo toro, para salir así a hombros y darle a la afición de ese país una reinauguración de triunfo.

Julián López El Juli y Luis Bolívar fueron quienes compartieron cartel con Andrés, pero no corrieron con la misma suerte y se fueron en blanco de esta corrida inaugural.

 

DN/I