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Van más de 40 mil a la marcha vs. gasolinazo

Al Centro. Nuevamente la protesta termina en el primer cuadro de la ciudad. (Foto: Grisel Pajarito)

Rebasando protestas anteriores en asistencia, alrededor de 40 mil personas salieron a manifestarse nuevamente contra el gasolinazo. En las principales avenidas de Guadalajara se gritaron frases como “¡fuera Peña, fuera Peña!” y “¡no al gasolinazo!”; se entonó el Himno Nacional, se coreó “Peña Nieto, Peña Nieto, ¿dónde estás, dónde estás? Chingas a tu madre, chingas a tu madre, donde estés” y la canción del grupo Molotov Gimme the power.

Fueron cuatro contingentes los que partieron de distintos puntos de la ciudad: la glorieta Minerva, la Plaza 18 de Marzo, la Fuente Olímpica y el Parque Revolución. En el camino fueron sumándose paseantes de la Vía RecreActiva.

Los cantos, gritos e invitaciones se fueron contagiando en el trayecto rumbo al Centro tapatío. “¡A esos tragones, les faltan pantalones!”, gritaban los inconformes cuando pasaban por los restaurantes ubicados sobre avenida Vallarta. A los curiosos les decían: “¡No nos mires, únete!” y “¡a ti que estás mirando, también te están chingando!”.

Conforme se incrementaba el número de manifestantes también fueron creciendo los gritos: “¡No que no, sí que sí, ya volvimos a salir!”, “¡el pueblo se cansa de tanta pinche tranza!”, “¡el pueblo unido jamás será vencido” y “¡México, despertó; México, despertó!”.

Desde el inicio hasta el fin la mayoría de las antiporras fue para el presidente de la República, Enrique Peña Nieto. Con rechiflas, mentadas, canciones, cartulinas y pancartas los tapatíos expresaron su descontento por el incremento en el precio de los combustibles.

Alrededor de las 10:30 horas inició la marcha. El Himno Nacional fue el banderazo de salida. También se instruyó a no cubrirse los rostros y señalar posibles rijosos como medida de seguridad para todos los manifestantes, recalcando que la marcha contra el gasolinazo era pacífica pero enérgica.

Hubo niños de todas las edades, personas de la tercera edad, jóvenes y adultos. Las mascotas también estuvieron presentes. Algunos acudieron en pequeños grupos de familia o amigos para sumarse al reclamo.

En el transcurso de la manifestación que avanzó sobre la avenida Vallarta, la Dirección de Protección Civil y Bomberos de Guadalajara llegó a contabilizar 55 mil manifestantes. Al final, cuando llegaron a Plaza Liberación, el conteo de la misma institución fue de alrededor de 40 mil.

Dada la multitud de asistentes sobre Vallarta, la organización no pudo detener el contingente cuyo plan requería doblar sobre avenida Federalismo, tomar Hidalgo y manifestarse frente al palacio municipal de Guadalajara: el flujo imparable avanzó sobre Juárez.

Los reclamos también fueron contra las llamadas reformas estructurales, como la fiscal, energética, educativa, así como contra la clase política.

En el palacio de gobierno, los manifestantes clausuraron la puerta principal del palacio de gobierno colocando cinta amarilla en sobre el arco principal.

Del mismo modo, el recinto legislativo del estado fue clausurado simbólicamente por manifestantes que al grito de “¡ladrones!”, “¡ineptos!” y “¡gordos!”; los guardias escucharon sin gestos los insultos de una persona que fue conminada al orden; otros los animaron para dejar sus puestos y unirse a la manifestación.

Ya en la Plaza Liberación entró un contingente que, acompañado del ritmo de los djembés, también expresaba el repudio contra el gasolinazo y el presidente.

Los grupos inconformes presentaron sus exigencias: los profesores, contra la reforma educativa; el sector salud, ya no debilitar el gasto en ese rubro; los ciudadanos en general se expesaron contra el gasolinazo, la reforma energética, los recortes presupuestales y la ineficacia del gobierno.

El Congreso Nacional Ciudadano recolectó firmas para una serie de iniciativas, como la eliminación del fuero político constitucional a nivel nacional; eliminación total del dinero que se entrega a los partidos políticos del presupuesto federal; eliminación del diputados y senadores plurinominales, y la reducción del número de senadores a 33.

Los asistentes proporcionaron sus datos personales y anotaron el número de la credencial del Instituto Nacional Electoral y su firma.

Los manifestantes se concentraron cerca de una hora y media en la Plaza Liberación, sitio que poco a poco se desocupó, sin que eso impidiera la charla animada y la indignación por los abusos, ineficacias e imposiciones que, a su criterio, los gobiernos aplican sistemáticamente.

Se suman ciclistas y mascotas

No les molestó que se interrumpieran algunos trayectos de la Vía RecreActiva durante casi una hora; al contrario: se sumaron ciclistas y mascotas a la megamanifestación en contra del gasolinazo.

Los asiduos al paseo dominical respaldaron la protesta, tomaron las cartulinas en blanco que les regalaban los manifestantes, plasmaron su inconformidad y se adhirieron al contingente.

Quienes llevaban a sus mascotas les pusieron en sus collares letreros con frases como: “Fuera Peña”, “Sin gas a tu madre” y “no al gasolinazo”. Otros simplemente los sumaron al recorrido o les hicieron un espacio en las bicicletas, vehículos o triciclos o llenos de pancartas.

Mientras que algunos niños que como plan original tenían salir a rodar en bici o patines a la Vía, les pidieron a sus papás sumarse a la manifestación. “Pues es que Peña es muy burro, hasta hizo lo del gasolinazo como si no supiera de historia”, explicó Adán, de quinto de primaria.

Los jóvenes y adultos recién incorporados a la marcha escribieron en las cartulinas mensajes como: “No más abusos, no más mentiras, no más gasolinazo ¡Ya basta”, “ni para unas papas me alcanza”, “Peña, traidor, mentiroso y ratero” así como “la patria no se vende, se ama y se defiende”, entre otras.

Según un sondeo en el lugar, las manifestaciones no han generado molestia a los asiduos a la Vía Recreactiva. Aunque sí se escuchó decir a un hombre de alrededor de 60 años que vive en la zona Centro quejarse: “Ya vienen con su desmadre otra vez, como si sirviera de algo”, dijo entre dientes mientras cargaba una bolsa de mandado. No se reportaron incidentes. Martha Hernández Fuentes

 

DN/I