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Emprendedores tapatíos ofrecen brazaletes para caballeros

 

Argos emergió con la idea de atender el mercado de varones que gustan de usar accesorios de joyería. La empresa se dedica a la fabricación de pulseras o brazaletes.

La joven emprendedora María Fernanda Villarreal Delgado recordó como su socio Diego Ortiz Serrano le propuso crear un nuevo producto para atender la necesidad de un sector de la población que gusta de la moda. “A los hombres les gusta sentirse guapos, poderosos”, dijo ella.

La empresa tapatía inició hace apenas con dos personas, ahora ya emplea a 12. Y su ha multiplicado su cadena de distribución.

Forman parte de la tercera generación de Joya Emprende de la Cámara de la Industria Joyera de Jalisco y decidieron empezar con la creación de brazaletes de piel italiana.

“Se le llama piel italiana por tipo el curtido pero es piel de res y es el mejor en su tipo. Nos empezó a ir muy bien, iniciamos con eso y con otro material sintético que nylon y todo referente al símbolo griego que es un tridente”.

La empresa tiene aproximadamente año y medio de creada.

“La marca se llama Argos porque es una ciudad griega y significa plata, todos los diseños y el concepto de la marca lo basamos en la mitología griega. El logotipo de la marca es el tridente de Poseidón”.

Gustan más pieles exóticas

Fernanda Villareal agregó que todas las pieles que utilizan las adquieren en León y empezaron a ver otras opciones de pieles exóticas como la piel de mantarraya y de pitón.

“Estuvimos trabajando en cómo adaptar esas pieles en un brazalete como accesorio de joyería. Al inicio sólo vendíamos por redes sociales, Instagram y Facebook a donde nos llegaron distribuidores de varias partes de la república, entonces fue cuando empezamos a diseñar nuestro sistema de distribución. Precios de mayoreo, políticas de zonas, entre otros, pero no sabíamos en realidad como se manejaba un negocio por mayoreo”, señaló María Fernanda.

Mencionó que tenían tres meses con la marca cuando se acercaron a la Cámara Joyera donde recibieron asesoría sobre cómo manejar el negocio.

“Fue la mejor decisión que tomamos porque realmente no sabíamos ni qué hacer. El material de las piezas, de los dijes que manejábamos se llama zamak y es el material con el que hacen los herrajes de zapatos, de joyería no sabíamos nada, yo soy licenciada en Ciencias de la Comunicación y mi socio es licenciado en comercio, de diseño de joyería estamos aprendiendo”.

La joven empresaria mencionó que en su primera participación en una expo, fue cuando tuvieron la oportunidad de saber cómo se maneja el negocio de la joyería en México y en Latinoamérica.

“Nos llegaban clientes de Nicaragua, Estados Unidos, muchos interesados, sólo teníamos tres brazaletes con piel exótica y no estaba tan bien trabajada como ahora. Nos decía: están muy padres pero los dijes están muy feos. Otro cliente me dijo cómo puedes tener dijes de zamak y el baño de niquel que en Estados Unidos está prohibido”.

Están muy agradecidos. “Una cliente que ahora decimos es nuestra madrina nos dijo, ‘me encanta la piel pero los dijes están horribles’, vayan con este joyero de Guadalajara, cambia tus piezas y cuando las tengas bien hechas me marcas y las vendo. Y así lo hicimos”.

La joven emprendedora asegura que uno de los atractivos en sus brazaletes son las pieles exóticas que gustan mucho y ahora ya han participado en cuatro exposiciones.

Línea exclusiva para hombres

El mercado al que van dirigido es a la clase media alta, entre 25 y 45 años de edad  y es una línea especial para caballeros tanto atrevidos como conservadores. “Pensando en que los hombres también usan accesorios, se ponen la pulsera, se atreven a usar el complemento de un traje y es lo que nosotros les ofrecemos”.

Actualmente Argos cuenta con 65 modelos de brazaletes y varía el tipo de piel y metales.

“En piel de pitón tenemos una gama de colores diferente, en piel de mantarraya y los dijes son combinables. El cliente puede escoger su brazalete con la combinación que guste por ejemplo: piel de mantarraya con los dijes en baño de oro.  El modelo de cascos griegos es de los que más gustan porque es algo diferente y muy masculino. Las calaveras también están de moda. A los hombres les gusta sentirse guapos, poderosos, entonces tratamos que todos los diseños vayan acorde a ese concepto. Siempre tratamos de sacar nuevos modelos, colores, dijes, hay que estar innovando para nuestros clientes”, señaló María Fernanda Villarreal

Los precio de los brazaletes van desde 300 pesos de hilo náutico, 400 el de piel italiana, todos los dijes son en chapa de oro de 18 kilates, baño de rodio o de rutenio negro.

Un brazalete con piel de pitón y dijes en baño de rutenio negro tiene un costo de mil pesos y uno de piel de pitón con chapa de oro cuesta 900 pesos. El rango de precios es de 300 a mil 200 pesos por pieza.

El valor de la distribución

Argos actualmente cuenta con aproximadamente 20 puntos de venta, tanto en Guadalajara como en otras ciudades del país. Plaza Andares, la Gourmetería, Poltrone barbería, Gran Patio, entre otros.

“Realmente nuestro cliente es el mayorista, hacemos venta unitaria por medio de redes sociales o por amigos, pero nuestro enfoque es el cliente mayorista, uno de los principales es Privalia, outlet de moda más grande de Latinoamérica, con ellos tenemos campañas mensuales de 800 piezas. Cimaco  es una tienda departamental del norte, con ellos vendemos en Torreón en dos sucursales, en Saltillo y Mazatlán, también en el hotel Hilton de Los Cabos, Veracruz, Sonora, entre otras”, aseguró la Villareal Delgado.

“Todos los dijes traen capa protectora para que la chapa o el baño dure más tiempo. Nuestros primeros clientes eran chavos de universidad que le vendían a sus amigos”.

Los brazaletes tienen garantía y si se despegan se les repone, además de que la producción es artesanal. Los brazaletes se empacan en bolsa de gamusa grabadas con el nombre de la marca. Para este año los emprendedores joyeros esperan incrementar sus ventas en el país.

 

DN/I