Catedral salió ilesa, confirma el cardenal

La Catedral de Guadalajara se salvó al paso de la tuneraldora, aseguró el cardenal Francisco Robles Ortega.

“Ya la tuneladora pasó por enfrente de Catedral y gracias a Dios se puede decir, se puede afirmar que el edificio de Catedral tuvo un buen comportamiento ante el paso de la tuneladora”.

“No hay medidas de prevención de decir ‘no se use el edificio, hay que esperar revisarlo’, no hay nada, nada que ponga en riesgo el edificio por el paso de la tuneladora, por eso está sirviendo con normalidad”.

Al ser cuestionado sobre las grietas que se detectaron en el inmueble y que fueron dadas a conocer hace unas semanas, Robles Ortega aseguró que son viejas y son parte de los pendientes que tiene el edificio.

“Por lo que yo sé, no hay nada que nos preocupe o nos obligue a tomar medidas extraordinarias, yo no tengo conocimientos de fisuras nuevas, las que yo tengo conocimiento casi de mi llegada aquí es de las necesidades que tiene la Catedral en cuanto a mantenimiento integral del edificio y son unas grietas del lado de Hidalgo, pero nada más se me ha reportado”.

En caso de que se detecten daños causados por las obras de construcción de la Línea 3 del Tren Ligero, reiteró, será la empresa encargada de los trabaos la que responda por éstos y haga las reparaciones correspondientes.

Al terminar de oficiar la misa en la Catedral, el arzobispo tapatío se refirió al inicio de la Cuaresma, la cual arranca el miércoles con la imposición de la ceniza.

“Es el inicio del camino que va a culminar con la pascua, donde vamos a dar un paso de la vida de pecado, de la vida de alejamiento de Dios a resucitar a una vida nueva con Dios”.

“El signo de la ceniza es un signo penitencial, quiere decir que quien lo recibe, quien se lo impone en la cabeza está dispuesto a recorrer todo este camino de la Cuaresma para morir en su vida a todo aquello que lo aparta del amor de Dios, lo aparta del amor de los hermanos para resucitar con Cristo a una vida nueva; si no se hace con esa visión y con la intención de recorrer todo el camino penitencial, pues queda como un signo cualquiera, como un signo vacío, tal vez alguien lo tome como mágico, pero no es eso”.

En cuento a la abstinencia de comer carne los viernes de cuaresma, así como el miércoles de ceniza, recordó que cuando no se puede hacer ese sacrificio se debe cambiar por un acto de caridad.

Robles Ortega mencionó que los fieles que decidan seguir el camino espiritual de la Cuaresma sabrán balancear entre la fe y el descanso.

En otro tema, respaldó la realización de volantas aleatorias por parte de autoridades policiales y militares, pero deberán hacerse respetando los derechos humanos.

“Se ve positiva la campaña, siempre y cuando se haga con todas las garantías de los derechos individuales y con todas las normas, pero yo pienso que es una campaña, si ellos están en conocimiento de que hay una gran cantidad de armas dispersas en posesión de civiles, pues vale”.

DN/I