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Nayarit: PRI vs. PRI

En Nayarit saben que en el proceso electoral de junio próximo por la gubernatura, los adversarios del candidato del PRI, Manuel Cota, no son ni el aliancista (PAN-PRD) Antonio Echavarría ni el ex priísta ahora neopemecista Raúl Mejía, sino el propio gobernador Roberto Sandoval, quien en su momento pretendió imponer su gallo a la candidatura.

La detención en los Estados Unidos del fiscal de Nayarit, Édgar Veytia, abrió un enorme boquete en el proceso electoral del estado vecino que, sin lugar a dudas, le pegará fuertemente al PRI, tanto a su candidato a la gubernatura como al actual gobernador, de quien se dice que, por supuesto, lo menos que quiere es el triunfo del abanderado de su partido.

Si ya de por sí la sola alianza del PAN y PRD postulando a Echavarría junior como candidato colocaban al PRI en una posición de desventaja, ahora con el caso del fiscal y la ruptura entre el mandatario estatal y el candidato de su partido la situación se agudizó al máximo.

Cuentan que Sandoval no ha perdido la oportunidad de bloquear o boicotear al abanderado priísta desde antes de que obtuviera oficialmente la candidatura, como sucedió en el pasado Congreso Nacional Extraordinario de la CNC, celebrado finalmente en agosto pasado en Nayarit, que sería la presentación de Cota Jiménez como precandidato a la gubernatura, de manera extraoficial.

Y el hecho más evidente de esa oposición del mandatario estatal al candidato priísta se registró en el pasado acto donde Manuel Cota rindió protesta como candidato, pues aseguran que a una señal de Roberto Sandoval –colocarse el sombrero– comenzó a abandonar el recinto un buen número de asistentes, cuya ausencia fue advertida por no pocos cuando hacían uso de la palabra el propio abanderado y el dirigente nacional del PRI, Enrique Ochoa.

También se asegura que con miras a la campaña proselitista, en el PRI advirtieron que en algunos municipios nayaritas sería complicado llevarla a cabo por un clima de inseguridad para el candidato Cota del que ahora se interpreta no era ajeno el ex fiscal Veytia.

La pregunta que surge ahora es: si Manuel Cota no es el candidato del gobernador Sandoval, ¿entonces quién de los que juegan lo es? Pero antes se cuestionan: ¿cómo le hará frente el mandatario estatal a esta severa crisis que le ha explotado en las manos ante la detención del encargado de la seguridad pública en la entidad que es acusado por las autoridades de los Estados Unidos de conspiración internacional para importar, fabricar y distribuir ilegalmente heroína, metanfetamina, marihuana y cocaína en el vecino país del norte?

También se abre la duda sobre cómo enfrentará este caso el candidato Manuel Cota, porque ya sabemos que sus opositores buscarán sacarle raja con la prudencia del caso, pues saben que el territorio está dinamitado por esta aprehensión y lo que ella arroje ante el anuncio de que se dejará venir una avalancha de detenciones de otros funcionarios estatales, también federales y hasta notarios públicos, trascendió, presuntamente involucrados con el ex fiscal.

Si la contienda electoral en Nayarit no había atraído la atención del exterior, pues la mirada estaba puesta con especial interés en el Estado de México –que por supuesto seguirá robando cámara–, con la aprehensión del fiscal estatal ha atraído los reflectores a la par del seguimiento del caso con tintes judiciales.

Hasta el momento no se ha conocido resultado de encuesta alguna, confiable, que permita la medición de las preferencias electorales y su repercusión tras el caso del fiscal, aunque la percepción dentro y fuera del PRI era una desventaja para el candidato cenecista.

Esta historia político-policiaca en Nayarit apenas empieza. Veamos si el final llega pronto o se decantará poco a poco. Al tiempo.

ES TODO, nos leeremos ENTRE SEMANA.