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Declaracionitis sobre El Nixticuil

“En la protección y el cuidado del bosque Nixticuil no se debe escatimar. El alcalde, Pablo Lemus, reitera su compromiso de salir adelante con una protección intensiva y cero tolerancia a la invasión del bosque”; “esto va a marcar un parteaguas para que la sustentabilidad llegue a esta área natural y va a lograr que muchos conflictos comunitarios se apacigüen, porque se les va a dar voz”.

Esas dos citas fueron extraídas de un boletín enviado por el Ayuntamiento de Zapopan el 29 de marzo de este año para anunciar la creación de un comité técnico en el Nixticuil, una figura administrativa que vele por el bosque y coordine las acciones tendientes a protegerlo integrando a los que conviven más de cerca con el ecosistema.

Después de nueve años de firmado el decreto de protección, llegó en el día en que se conformará el famoso comité y empiecen a tomar orden las medidas de conservación, que dicho sea de paso, hasta ahora son un misterio.

La primera declaración sobre el cuidado al bosque es de quien fue nombrada presidente del comité técnico, Patricia Fregoso Cruz, funcionaria del ayuntamiento con el cargo de coordinadora general de Gestión Integral de la Ciudad. La segunda cita es de la activista María Elena Sánchez Ruiz, de la organización social Amigos del Nixticuil.

Aunque la Ley Estatal de Equilibrio Ecológico y Protección al Ambiente establece que estos comités deben estar integrados por todos los grupos que conviven con el área natural protegida en cuestión, en el comité del Nixticuil la mayoría son funcionarios de Zapopan que ni siquiera se habían relacionado con el bosque, pero debían llenar las vacantes.

Entre ellos figura Michelle Leaño Aceves, regidora del Partido Verde; Mauricio Ferrer, en representación de la Dirección de Participación Ciudadana; el secretario técnico y la presidente del comité, Fregoso Cruz. El resto son los representantes vecinales Anselmo Cruz y Armando Sánchez, así como la activista Sánchez Ruiz.

No pasaron ni 10 días de la integración de este comité que prometió velar por los intereses del Nixticuil y sumar voces cuando el alcalde Pablo Lemus aprovechó la entrada de la Semana Santa para meter maquinaria y empezar, sin previo aviso, la ampliación a tres carriles de la avenida Ángel Leaño, justo en el tramo más crítico que es al inicio del bosque.

Sobre esta obra de la que se ha dicho tanto y por ende se ha generado tanta ambigüedad en la población, hay dos cosas que decir: una, no está dentro del polígono protegido del Nixticuil como el alcalde Pablo Lemus ha repetido varias veces, y está en lo correcto; y dos y más importante, el bosque no empieza donde marca el plan parcial ni el decreto de protección, es mucho más amplio de lo que marcan los documentos, por lo tanto la ampliación sí impacta al equilibrio ecológico.

Dicho esto y pudiendo mediar entre los señalamientos del Comité Salvabosque y el alcalde Pablo Lemus, que cada quien en su trinchera ha recurrido a descalificaciones entre sí, el comité técnico sería una excelente voz para sentar una opinión ecuánime, pero hay un problema de origen: está amarrado por los subordinados de Lemus que lo integran.

¿Y los regidores de oposición?, ¿y el Partido Verde en Zapopan?, ¿y las pocas voces independientes dentro del comité técnico? Su silencio habla más de lo que pudieran explicar en una declaración sobre el cuidado al medio ambiente, de ésas que llenan los boletines de prensa.

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JJ/I