Corre Línea 3 sin el aval ciudadano

En Jalisco no hubo consulta ciudadana sobre dos importante obras públicas: la Línea 3 del Tren Ligero y la Presa El Zapotillo, aseguró el presidente de la Asociación Mexicana de la Industria de la Construcción (AMIC), Francisco Gallo Palmer.

“¿Fue la ciudadanía consultada para ejecutar esas obras? No. Es una determinación de tipo político y eso es lo que tenemos que terminar, porque el dinero es de los ciudadanos, no es de los políticos. Las inversiones tienen que ser planeadas, concentradas, aprobadas por la ciudadanía y eso no está pasando. Por eso tenemos este tipo de problema”.

Al cuestionarle qué debe hacer la sociedad ante la carencia de consulta y cuando las obras ya se realizan, aseguró que la ciudadanía debe organizarse, “la ley nos permite crear asociaciones civiles, vamos a organizarnos cada colonia, cada municipio. La leyes nos permiten participar en los gobiernos municipales o del estado, pero la ciudadanía no lo hace”.

Añadió: “Muchos empresarios no quieren integrarse porque tienen el temor de que los rechacen en algún municipio. Tenemos que quitarnos esa idea, vamos a trabajar de manera organizada”, y aseguró que los gobiernos van a tener que escuchar a la ciudadanía.

Mencionó que el gobierno federal está licitando 180 magnoproyectos en la República con un costo de cerca de 500 mil millones de pesos en asociaciones público y privadas.

“No es un dinero que tenga ahorita el gobierno, lo van a contratar y lo van a pagar los próximos dos sexenios. Significa que los ayuntamientos no van a tener dinero para sufragar los gastos para la infraestructura municipal y vamos a empezar a dejar a miles de ciudadanos sin atención de agua potable, de las plantas tratadoras, potabilizadora. Debemos que administrar el gobierno como cuando administramos nuestra casa, pero no”.

Comentó que no se realiza una buena administración y prueba de ello es que se hacen carreteras que se concesionan a un tercero, “lo más triste es que esos 500 mil millones, 180 proyectos, se están quedando en mano de ocho o 10 empresas; si el gobierno federal pensara en los mexicanos, estaría dispersando el recurso en las más de 40 mil empresas constructoras que existen en el país”.

Comités

Francisco Gallo informó en su visita a Jalisco que presentaron al Congreso de la Unión una iniciativa para que existan los comités ciudadanos, con el objetivo de que sea la sociedad la que elija las obras que se hacen en el país.

A la par, aseguró que la mala calidad de las obras responde a un compromiso, el político, por lo que buscarán que los funcionarios ya no tomen decisiones respecto a las obras ni que se las otorguen a sus amigos.

“Ya presentamos la propuesta al Senado de la República, a la Cámara de Diputados, para que se modifique la ley de obras públicas para terminar con la corrupción, así no podrían los funcionarios dar los contratos de obra pública a sus amigos. También pedimos que se integre la obligación de las dependencias de crear comité ciudadano de fallos, donde participen los ciudadanos beneficiados por esa obra, donde conozcan el proyecto, toda la tramitación de la licitación pública, que participen en el análisis de propuestas económicas y que tomen una decisión; va encaminado a que los comités van a inclinarse por empresas locales”. Agregó que pretenden que toda obra pública se asigne por licitación pública.

“¿Fue la ciudadanía consultada para ejecutar esas obras? No. Es una determinación de tipo político y eso es lo que tenemos que terminar”
Francisco Gallo Palmer, presidente de la AMIC

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