Polos opuestos

El contexto bajo el cual se jugaría el Clásico Nacional el 23 de septiembre cambió por completo para Chivas.

En aquel entonces, poco antes de registrarse el sismo de 7.1 que sacudió a la Ciudad de México, el Rebaño aún tenía posibilidades para clasificarse.

Al reanudarse hoy la Fecha 10, Chivas espera prácticamente un milagro que lo lleve a la llamada fiesta grande.

El factor que establece una diferencia en las aspiraciones de cada uno, al ubicarse América en segundo lugar general con 23 puntos, y el Guadalajara en antepenúltimo con 9 unidades, es un ingrediente que habría de restarle interés al partido de esta noche en el Estadio Azteca.

Pero el lugar común y la historia señalan que en este tipo de partidos el orgullo, el coraje y el prestigio de cada uno están por encima de los 3 puntos en disputa.

En Chivas tienen claro que una victoria sobre su acérrimo rival en nada va a cambiar, es más ni siquiera maquillará la pésima campaña que tiene al equipo al borde de la eliminación, pero sí entienden la alegría temporal que puede otorgarle a sus aficionados, y por consecuencia ser un detonador para cerrar con mayor dignidad la fase regular del Apertura 2017.

La lógica indica que hoy el América, de acuerdo a su momento futbolístico, debe ganar esta noche y esa superioridad se debe reflejar en un juego convincente en un marcador amplio.

Los otros dos clásicos capitalinos favorecieron a las Águilas con un 2-1 sobre Pumas, y apenas el sábado un contundente 3-1 ante Cruz Azul. Con tal motivación, más el agregado del obvio deseo de someter a su odiado rival deportivo, se puede intuir que la victoria sería para el cuadro de Miguel Herrera.

El factor que tiene a su favor Chivas, es que su única victoria en 12 partidos se registró en calidad de visitante frente a Pachuca, y que si es capaz de repetir el buen juego que mostró en el segundo tiempo ante Monarcas la noche del sábado, tiene una esperanza de sobrevivir a su enemigo capitalino e inclusive obtener los 3 puntos.

Los aficionados rojiblancos, de los cuales hay una gran parte en la Ciudad de México, esperan que el pundonor saque a flote a un Rebaño con números pobres, pero con el hambre de reivindicarse en la recta final de la temporada.

ÁRBITRO: Francisco Chacón

ESTADIO Azteca

21 HORAS

“He aprendido a jugar clásicos”

Miguel Herrera suma 16 años como técnico en Primera División, y en dicho lapso ha dirigido en dos etapas al América.

Al mando de las Águilas ha aprendido a jugar dichos partidos, y de cuatro enfrentamientos en su anterior periodo suma tres victorias y una derrota.

El Piojo comenta la diferencia de disputar un encuentro de dicha naturaleza.

“Hemos aprendido a jugar los clásicos, no se ganan con números ni con la camiseta, sino metiendo, jugando mejor futbol, y mañana (miércoles) tenemos que hacer más que el rival. Pero yo sólo planteo los partidos, los muchachos son los que hacen todo, son ellos los que ganan”, dijo ayer en conferencia de prensa.

Herrera espera un Chivas aguerrido pese a su mala temporada.

“Espero un equipo combativo que querrá darle una alegría a su afición, pero nosotros también, porque con un triunfo nos pondremos a un paso de la clasificación”. Omar Fares

28 partidos entre América y Chivas en el Azteca en torneos cortos

9 Victorias y 30 goles registra el Guadalajara en patio ajeno

9 Triunfos y 26 goles para las Águilas, por 10 empates

Nada está escrito

A través de la historia está más que demostrado aquella frase de que no importan las condiciones en que lleguen los contendientes a un Clásico Nacional. Cualquiera puede estar en la cima de la tabla general, y otro en la parte baja, lo cual no significa que el de arriba ganará.

Es el punto de quiebre del futbol, en el que no existe la lógica ni el sentido común. Hoy los números colocan a Chivas en el antepenúltimo lugar de la tabla, mientras que América se ubica en el segundo sitio.

No es la primera vez que el Rebaño se cruza con América en dichas condiciones y logra obtener un buen resultado, o al menos ser arrasado en el marcador como señalan las estadísticas.

En la Temporada 1989-90, Chivas compartía el último lugar de la tabla general con Atlante con 16 puntos, mientras que las Águilas eran el sublíder con 29 unidades. El Rebaño acababa de cambiar de técnico tras el desafortunado paso de Ricardo La Volpe como técnico, y se estrenaba con Miguel Ángel Zurdo López. América era el favorito, pero el marcador terminó 2-2 ante un partido vibrante en el que no se notaron las diferencias.

Para el Invierno 2000, América tampoco atravesaba por buen momento, pero superaba a Chivas por puntos. El Rebaño era penúltimo general con 4 unidades, y las Águilas estaban en el lugar 15 con 7. Para sorpresa general, el Guadalajara se impuso con un contundente 3-0 en el Azteca.

Meses después, en el Verano 2001, de nuevo el Guadalajara llegó en circunstancias adversas, con 6 puntos y en la posición 15, mientras que América ocupaba la décima posición con 8 unidades. La victoria fue para las Águilas por 1-2, sin evidenciar la diferencia en números en un partido que cualquiera pudo ganar.

Esta noche, las circunstancias son similares, con un Chivas casi eliminado y un América fortalecido en todos los sentidos.

JJ/I