INICIO > OPINION
A-  | A  | A+

SEA: ¿habrá ‘mano negra’?

Quien crea que Andrés Talamantes Lobato está muerto… se equivoca.

Si bien fue la causa por la que el gobernador Aristóteles Sandoval Díaz solicitó al Congreso dejar sin efecto la terna que envió para que de ella se eligiera al primer fiscal anticorrupción –“existe un perfil (de la terna) que, sin bien fue evaluado, no cumple con ciertas disposiciones”–, legalmente Talamantes Lobato puede aún ser designado para ese cargo.

Todo dependerá –dicen en los corrillos legislativos– de la fuerza que la fracción alfarista de Movimiento Ciudadano esté dispuesta a imprimirle para sacar adelante a su candidato y se cumpla así el pacto inicialmente acordado en los sótanos del poder.

Pero para que ello suceda tendrá que agotarse el camino jurídico que establece la convocatoria y llegar a la designación por insaculación, y así poder salir airoso el próximo martes 12, fecha en que los diputados pretenden sacar los nombramientos que tienen que ver con el Sistema Estatal Anticorrupción.

Y es que pese a la solicitud del mandatario estatal de dejar sin efecto la terna enviada, el Congreso está obligado a cumplir el proceso que marca la convocatoria para evitar que el asunto sea impugnado y se judicialice.

Para entender mejor lo anterior, imaginémonos el siguiente escenario sobre los tiempos que los diputados tienen para cumplir con los plazos establecidos y lograr que antes de la primera posada haya fiscal anticorrupción, vía fast track:

Jueves 7: Convocados para hoy a las 9 horas, los integrantes de la terna deberán comparecer ante la Comisión de Gobernación. La duda es si lo harán o no, luego de enterarse de que su postulación fue revocada por el Ejecutivo.

Si no se presentan la comisión legislativa deberá notificarlo al pleno y ante el que la terna tendrá que ser sometida a votación a fin de que las dos terceras partes de los integrantes del Legislativo elijan a uno de sus integrantes. Se votará tres veces y ninguno logrará los 26 votos a favor.

Entonces se notifica al gobernador que nadie de su primera terna fue elegido y se le pide que envíe una segunda. Este mismo día el mandatario estatal podría mandar una nueva terna. O puede hacerlo el día siguiente.

Viernes 8: El gobernador Aristóteles Sandoval envía la segunda terna y sus integrantes son notificados este mismo día para que comparezcan el próximo día hábil, que es lunes 11.

Lunes 11. Comparecen los tres nuevos candidatos a ser fiscal anticorrupción. La Comisión de Gobernación emite un dictamen para que sea puesto a consideración del pleno del Congreso, que es convocada a sesión al día siguiente, martes, para elegir de entre los integrantes de esta nueva terna al fiscal anticorrupción.

Martes 12. Sesiona el pleno del Congreso. Son sometidos a votación los integrantes de la terna y extrañamente ninguno obtiene el apoyo de las dos terceras partes del pleno en la primera ronda; sigue la segunda y tampoco; y llegan a la tercera y ninguno es ungido.

Entonces se recurre a lo que dice la convocatoria y el nuevo fiscal anticorrupción tendrá que ser electo, por la vía de la insaculación, de entre los seis que integraron las dos ternas enviadas. Y… ¡albricias! El nombre en la boleta que se elige al azar es el de… ¡Andrés Talamantes Lobato! Y colorín colorado, el proceso es legal.

Ojalá y no ocurra lo de cuando se eligió al nuevo titular del Itei hace unos ayeres también por insaculación. El acuerdo fue que el elegido sería Esteban Garaiz –presente en el graderío–, pero se equivocaron de papeleta y sacaron la del que sería suplente… ¡Jorge Gutiérrez Reynaga!

Este escenario aquí dibujado puede considerarse absurdo o exagerado, pero cuando los diputados quieren salirse con la suya, y si los alfaristas quieren para ellos la Fiscalía Anticorrupción, esto puede suceder.

ES TODO, nos leeremos ENTRE SEMANA.

JJ/I