Tiene Zapopan nueva escultura

La tercera escultura urbana en el espacio público de Zapopan develada ayer se encuentra en la Glorieta de Sebastián Bach y calle Independencia, frente a uno de los accesos principales del Parque Metropolitano; se llama Cubo torcido y fue diseñada por el artista tapatío Gonzalo Lebrija.

De acuerdo con el autor, se trata de una estructura de gran formato diáfana que según la perspectiva se aprecia de forma distinta y es esto su principal atractivo. A diferencia de las esculturas de Guadalajara, las de Zapopan son patrocinadas por la iniciativa privada como Grupo Exim y Nice México.

“Es una escultura monumental, pero a la vez muy ligera, muy liviana que pudiera ser traslúcida, transparente que además está en una glorieta y al darle vuelta va cambiando de forma, hay una parte quinética al irle dando vuelta”, explicó el autor en entrevista.

“Para mi es una pieza muy positiva, si bien para cambiar el tiempo y el espacio se necesita un gesto mínimo, para llevarlo a cabo se necesita un cambio monumental, es la intención de esta escultura y es lo que propone, cambiar el tiempo y el espacio”, añadió.

Cuestionado sobre la polémica que han desatado las anteriores piezas inauguradas en diversos puntos tanto de Zapopan como de Guadalajara, siendo Sincretismo la más conflictiva para los grupos católicos, Lebrija señaló que cuando hay dinero público de por medio la respuesta es diferente, por lo que espera que estos patrocinios sean del agrado de los ciudadanos, ya que buscó generar una pieza que aporte.

“A mí me cuesta mucho trabajo de repente el arte urbano también, es difícil, esta es la primera obra que hago permanente para un espacio público y estuve a punto de no aceptar el proyecto, me costó trabajo decidirme a hacerlo y tomé en cuenta todas estas pertinencias, ¿qué significa una obra en el espacio público?, no es un trofeo, tiene que generar, que dar, que cuestionar, mandar a la gente con una historia para pensar, yo la pensé muy bien y espero que tenga esa respuesta futura”, agregó el escultor.

Por su parte, el alcalde Pablo Lemus Navarro señaló que Cubo torcido es también una forma de darle espacio a un escultor de reconocimiento internacional, pero que no ha tenido en Guadalajara, su ciudad de origen, el mismo apoyo ni proyección, de ahí que se le ofreciera la facilidad de plasmar su obra.

“¿Qué significa una obra en el espacio público?, no es un trofeo, tiene que generar, que dar, que cuestionar”
Gonzalo Lebrija, autor de la obra

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