Ganar o perder es cuestión de enfoque

Triunfo y fracaso es relativo conforme se haya logrado la victoria o se haya sufrido la derrota. En la antigua Grecia fue más valiosa una muerte de un espartano que la gloria de una ateniense, a la vista los primeros fueron los guerreros apasionados y los segundos tácticos inhumanos. Dicen que los espartanos preferían la muerte a la vergüenza, y los segundos se quitaban vergüenza para ganar con deshonra. Lo cierto es que hasta la fecha ganar o perder tiene diferente valor de acuerdo a cómo se logró. 

Con estos antecedentes es más fácil explicar cómo muchos de los que no lograron su meta este año, cierran como vencedores.

El ayuntamiento de Guadalajara premió a una veintena de estos triunfadores el pasado fin de semana, contrario a lo burdo que resulta entregar un reconocimiento al que más títulos de renombre haya ganado este año, eligieron a 20 deportistas que han llevado un palmarés impecable, que han superado los escollos para poder llegar hasta sus metas.

Muchos han dejado su hogar, familia y hasta hijos para ceder a los concentrados nacionales que lo único que les aseguran es la posibilidad de conocer más de cerca las convocatorias de selección nacional que se mueven a merced, gusto y conveniencia de los funcionarios deportivos.

Jalisco tiene campeones de a montón, miles y sólo algunas decenas de guerreros que se mantienen en lucha pese a los obstáculos que han  encontrado ante la falta de apoyos por los problemas federados que los tienen sumidos en la incertidumbre de su presencia en eventos de fogueo internacionales.

El deporte mexicano, que por ciclos y casi un siglo no logra enterrar sus demonios que más le afectan: la burocracia deportiva. Así el panorama, los deportistas nacionales que sueñan con llegar a Tokio 2020 han encontrado en otros nichos el impulso suficiente para triunfar, algunos de ellos afiliados a la Secretaría de la Defensa Nacional, otros más con apoyos como los que ofrecen los ayuntamientos que al final de 2017 sólo Guadalajara fue el que cumplió, otros como Zapopan se quedaron en mero esfuerzo que duró hasta la primera ronda de recursos que acabaron en abril pasado, de los otros, ni hablar, ni para eventos deportivos les alcanzó.

Los especialistas internacionales del deporte saben qué cualidades físicas elegir para definir quién es mejor, pero en México, habría que sumar en la detección de talentos una lista de cualidades mentales para resistir presión, resolver problemas y brincar escollos extradeportivos, ser tal cual, triunfadores pese a las derrotas que puedan darles la falta de apoyo.

@PatyPenia

JJ/I