Un triunfo de peso

Ayer tuvo lugar la primera corrida del año en la recién iniciada segunda parte de la temporada grande en la Plaza México.

De buenos detalles y con solitaria oreja, los tres en el cartel abrieron el año con buenos momentos para el coso capitalino; el regreso de Jerónimo resultó como se esperaba, lleno de entrega y con oreja de peso para el oriundo de Puebla.

Luego de apadrinar la confirmación de alternativa del matador Antonio Lomelin, el poblano recibió de regreso los trastos para lidiar a su primero de la tarde, un toro de pocas opciones y recorrido al que Jerónimo tuvo que Implementarle maestría.

Tandas atacando y recortando el cite fueron las que se le jalearon al diestro, que se fue en blanco en este primer enemigo al no conseguir redondear su faena.

Con el segundo en turno fue un mejor panorama, pues lidió con un astado que se dejó echar mano, cuajando el de Puebla sentidas tandas por derecha, con sentimiento y conexión, que la afición capitalina aplaudió fuerte.

En su afán de sostener un regreso a esta plaza después de varios años de ausencia en ruedos nacionales, Jerónimo logró su cometido y, tras sepultar el acero en todo lo alto, mereció una oreja de mucho mérito.

Por su parte, tanto el confirmante Lomelin y el segundo en el cartel, Juan Pablo Llaguno, dejaron para la tarde faenas de mucho mérito y solidez, al mostrar en los dos de su respectivo lote, actuaciones en las que dejaron notar su avance y madurez, a su muy peculiar estilo de ejercer el toreo.

Tanto Juan Pablo como Antonio destacaron más en su quehacer con sus segundos toros, y aunque se fueron en blanco sin orejas, se llevaron el reconocimiento de la afición a su buen toreo.

EN PUERTA

Ésta fue la primera corrida del año en esta segunda parte del serial capitalino; el domingo harán su aparición José Garrido, Ignacio Garibay y la confirmación de alternativa del hidrocálido Diego Sánchez

JJ/I