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Inflación y atonía

Arranca enero de 2018 con una serie de aumentos en productos, bienes, servicios y derechos, muchos de primera necesidad, lo que provocará una mayor disminución en los niveles de vida de la mayoría de la población.

Suben la gasolina, el gas, la energía eléctrica, el dólar y ello impacta prácticamente todos los productos pero hay algunos como las tortillas, alimento básico en la dieta de los mexicanos, que amenaza con llegar a 17 pesos por kilo, casi 20 por ciento de un salario mínimo.

El Banco de México aceptó que su esfuerzo por controlar la inflación no alcanzará el éxito y para este año pronostica más de 5 por ciento anual en el mejor de los casos, lejos del objetivo de 3 por ciento establecido, aunque menos del casi 6.77 por ciento en que se cerró 2017.

Además los especialistas pronostican otro aumento en las tasa de interés para el próximo febrero, lo que hará más caro el crédito y presionará la economía a la baja, cuando la meta es un  raquítico crecimiento de 1.6 por ciento, menos del crecimiento poblacional.

La situación es complicada, más aún cuando este es un año de elecciones federales y estatales en la mayoría de las entidades, lo que genera una mayor inquietud social y política, que en este caso pega más al candidato oficial, al abanderado priísta José Antonio Meade.

AHORROS

Según el priísta, hoy secretario general de la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económico (OCDE), José Ángel Gurría, no hay peligro de desbandada de inversiones ni de empresas hacia Estados Unidos derivada de la reforma fiscal en Estados Unidos.

Sin embargo no hay duda de que la reforma de Donald Trump impactará negativamente en los niveles de inversión extranjera directa en México y también en la expansión de algunas empresas transnacionales aquí y peor aún en la instalación de nuevas.

La baja en la tasa impositiva corporativa en Estados Unidos de 35 a 21 por ciento, esto es una reducción de 40 por ciento, es realmente elevada por lo que no hay medidas que el empresariado pueda hacer aquí con el actual esquema fiscal mexicano.

Se vive una situación complicada y hay quienes dicen que México podría bajar la tasa del ISR pero con una ampliación al IVA a medicinas y alimentos, lo que es hoy impensable por transcurrir el proceso electoral que concluye el 1 de julio.

@salvador_mtz 

JJ/I