De dramaturgia y lo colectivo

Todos los días en Latinoamérica desaparecen personas. Pareciera que es un proceso del que no se puede escapar y que afecta por igual a niños y adultos, a ricos y pobres. De esto está escribiendo la dramaturga argentina Julieta Reyes en su estancia en Guadalajara, en la que además de convivir y conocer a otros profesionales del teatro, se sienta por las mañanas a escribir y compartir el texto en algo parecido a la escritura colectiva.

La joroba social, el título provisional de la obra, aborda entre otras cosas la memoria tras la violencia que vivió Argentina durante la dictadura. Esta obra se comenzó a escribir a través de un viaje que empezó la actriz por varios lugares de México y Sudamérica.

“Estoy comenzando a probar los textos en un formato semimontado, a ver qué ocurre”, contó la autora. “A mí como hacedora en general, a la hora de pensar la escena vinculado a la realidad me interpela la humanidad, los procesos políticos, sociales, económicos, de memoria, de resistencia y esta obra toca algunos temas que tienen que ver con realidades que nos atraviesan a todos como latinoamericanos”.

“A mí, teniendo en cuenta que el teatro está escrito para ser representado, más allá de que haya un montón de obras que jamás vieron la escena y se quedaron en el papel, en la estructura del texto y la génesis misma, sí está escrita para eso. El acontecimiento teatral sucede en ese momento. Pensar que uno escribe para, posteriormente, proyectar eso en una obra de teatro que cada función será única e irrepetible es lo que me apasiona”, contó Reyes sobre la escritura de teatro.

Desde hace ya un año, Julieta ha viajado desde Argentina con propuestas diversas de formación en teatro, principalmente de dramaturgia y de puesta en escena. Aquí en Guadalajara realizará una especie de taller-laboratorio de dramaturgia, que se va a desarrollar en Espacio Senda (Hidalgo 904, segundo piso) durante cinco días desde el 22 de enero.

La idea de trabajar en el laboratorio tiene que ver con desarrollar ejercicios a partir del conocimiento que todos están dispuestos a compartir. “Con la idea de que de verdad no hay una receta, no hay una fórmula, es algo en donde nos encontramos todas las personas que formamos parte del taller, por lo que es importante la dinámica de grupo que se da, muy interesante y muy intensa porque siempre la dramaturgia o la escritura teatral implica aprender a compartir la palabra y aprender a escuchar”, contó Reyes.

La creación de diálogos, de monólogos y en general de situaciones dramáticas, conflictos, subtextos e intertextos, es parte de lo que se trabaja en este taller, en un grupo de alrededor de 15 personas, en el que cada uno comenzará su recorrido personal por determinadas pulsiones que les movilicen a escribir y que tienen que ver con la experiencia singular de cada uno.

“Creo que cuando uno va al teatro eso es lo que va a ver, la singularidad de cada persona, de cada creador para proponer”, dijo la especialista. “Lo abordaremos a través de la dramaturgia de actor, la escritura colectiva, vamos a ver nociones de teatro posdramático para entender la escena contemporánea y ciertos procesos en los textos: entender que no solo escribimos teatro cuando estamos escribiendo una obra textual, escribimos con el cuerpo, escribimos con el texto, con todos los lenguajes que intervienen en el hecho teatral”.

Para participar

Para el taller no es necesario del todo tener experiencia en el teatro y de hecho la experiencia del taller se ha enriquecido con la presencia de otros artistas escénicos o escritores de otros géneros que suman al taller.

Los interesados pueden escribir y mandar una semblanza con Arcelia Gómez a [email protected] o llamar al 333127 7037. El taller se impartirá el lunes 22 al viernes 26 de enero de 6 a 9 de la tarde y tiene un precio de mil pesos. Alejandra Carrillo

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“Pensar que uno escribe para, posteriormente, proyectar eso en una obra de teatro que cada función será única e irrepetible es lo que me apasiona”
Julieta Reyes, dramaturga

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