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Meade: negro panorama

Seguramente José Antonio Meade Kuribreña llega hoy a Jalisco, para una gira de dos días, convencido de que los votos de esta entidad lo harán o no presidente de la República, como lo hicieron a Vicente Fox Quesada, Felipe Calderón Hinojosa y Enrique Peña Nieto, por referirnos a los tres últimos inquilinos de Los Pinos.

Meade Kuribreña llegará como precandidato del PRI seguramente a pedirle a la militancia jalisciense que lo adopte como uno de los suyos y le aporte su voto para lograr llegar a la Presidencia de México.

El precandidato priísta llega a Jalisco donde de acuerdo con una encuesta que aparecerá en la edición de esta semana en el Semanario, órgano de difusión del Arzobispado de Guadalajara, él se encuentra en la tercera posición de la preferencia ciudadana, superado por el candidato de la coalición De Frente por México, Ricardo Anaya Cortés, y el aspirante Andrés Manuel López, según la encuesta de la empresa consultora Polymetrix, aplicada el 27 y 28 de enero.

En un hecho inédito por ser la primera ocasión que este órgano informativo arquidiocesano le entra también al juego de las encuestas, en Jalisco López Obrador encabeza las preferencias electorales con 27 por ciento, seguido de Anaya Cortés con 23.1 por ciento y hasta el tercer lugar se encuentra el priísta con 16.3 por ciento. Detrás de Meade, muy lejanos, aparecen Margarita Zavala con 9.4 por ciento y luego el gobernador de Nuevo León, Jaime Rodríguez, El Bronco, con 3.5 por ciento.

En esta misma medición, a la pregunta: “Si supiera que su candidato no va a ganar, ¿por quién votaría para presidente de la República como segunda opción?”, José Antonio Meade cae hasta el último lugar.

La respuesta a la pregunta anterior, de acuerdo con la publicación del Arzobispado, fue 20.4 por ciento por Ricardo Anaya, luego 16.6 por ciento lo haría por Margarita Zavala, seguida de Andrés Manuel con 12.6 por ciento, después por El Bronco lo haría 7.3 por ciento y finalmente José Antonio Meade con apenas 6.8 por ciento.

En el rubro de la evolución del voto presidencial de los jaliscienses, registrado de septiembre del año pasado a enero del actual, López Obrador baja 3 puntos al tener hace cuatro meses 30.7 por ciento; Ricardo Anaya desciende 6 puntos, pues tenía entonces 29.1 por ciento; Margarita Zavala y Jaime Rodríguez en el mes patrio no registraban preferencia alguna, pero el rubro de indecisos también descendió, pues en septiembre era de 24 por ciento y en este mes pasado llegó a 20.8.

Por supuesto, no faltó la pregunta obligada en toda encuesta: “¿Por qué partido definitivamente no votaría?”. El resultado fue el siguiente: PAN, 4.8%; PRI, 43.3%; PRD, 5.5%; PT, 1.9%; PVEM, 1.8%; MC, 2.3%; Panal, 2.0%; Morena, 12.3%; Encuentro Social, 2.6%, y los indecisos suman 23.5%.

Según el órgano informativo del Arzobispado de Guadalajara, éste es el escenario electoral al que llegará hoy el precandidato del PRI y, por lo tanto, tendrá mucho camino que remar contra corriente. Y es que para los expertos, para quienes saben de esto, el Revolucionario Institucional tendrá que hacer circo, maroma y teatro para levantar a su candidato en Jalisco si quiere ganar la Presidencia de la República. De ese tamaño es el reto de los Meade, de los Ochoa, de los Castro y de los Pizanos, pero también de los Sandoval.

Yo he referido que lo que hemos visto a lo largo de los días que van de precampaña no se compara con lo que veremos cuando entren ya a la campaña. Será la guerra y ahí el escenario será otro, mucho muy diferente al de ahora. Ningún candidato tendrá consideración de su adversario. Suena muy trillado aquello de que la elección de julio será la madre de todas las guerras, pero algo así estaremos viviendo.

Sin duda que estos dos días en Jalisco, le servirán a Meade para irle tentando el agua a los camotes. Y si no, al tiempo.

ES TODO, nos leeremos ENTRE SEMANA.

JJ/I