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Rita

Este domingo se cumplen siete años de la muerte Rita Guerrero, vocalista de la mítica banda de rock mexicano Santa Sabina, quien falleció víctima de cáncer. El aniversario coincide con la presentación de Rita, el documental, del director Arturo Díaz Santana, quien realizó un documental de rock como lo dicta el manual.

Díaz Santana abunda sobre el mito Rita, la cantante que todos los adolescentes y maduros que la vieron en escena estaban enamorados, pero sobre todo dibuja las relaciones que mantienen los músicos de las bandas de rock en México, siempre en constante tensión, con los egos por delante y sin sentirse valorados plenamente, de forma implícita incluso, expone la mecánica del machismo. El relato muestra cómo la figura de la vocalista deja de ser un ángel divino para descender a la tierra y lidiar con las pasiones, pulsiones y sentimientos más humanos. Las salidas de tres de los músicos de la banda, se cuenta, se debieron a las tensiones, discusiones constantes y a que Rita, ordenaba, mandaba, dirigía, disponía, brillaba. Esa es una lectura.

Ver este documental es ver la radiografía de muchas bandas, donde hay alguien que lidera y crea, los demás lo siguen, ya sea por pereza o comodidad, más por lo segundo, al final hay desazón, un “no me dejaron hacer más”, naturaleza humana, que se potencia por ser una mujer con un magnetismo único, pero también con un alto grado de control, manipulación y chantaje para lograr sus objetivos.

Santa Sabina fue una banda comprometida, se sumó al apoyo y simpatía por el Ejército Zapatista de Liberación Nacional, tema que ocupa un sitio importante en el relato, pero por encima de su activismo, está su compromiso con el desarrollo de un producto artístico, eso hizo a Santa Sabina un grupo único, diferente.

Rita, el documental es un trabajo serio. No alaba a la banda de forma gratuita, la sujeta a las circunstancias de su tiempo y al contexto social en que se desarrollaron, hilvana todos los elementos que se conjugaron para que el grupo se volviera trascendente y subraya cómo sin ninguno de los azarosos caminos que transitaron, fue gratuito.

Ver a Rita Guerrero crecer ante los ojos del espectador resulta conmovedor: de la joven actriz, a la vocalista de un grupo que se convierte en vampira hasta una entregada cantante de música antigua, pasa, hay una larga lista de aciertos y errores, como en cualquier ser humano. Con tacto y tino, hay una inmersión breve y sustanciosa en su vida familiar, en la influencia que ejerció sobre su sobrina, la relación con su hijo Claudio. Amigas y hermanas la recuerdan, la vuelven cercana, humana y al mismo tiempo le ponen alas para devolverla al cielo de los mitos, ese es el efecto del documental, además de arrancar lágrimas.

@WhoIsFranco

FV/I