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El debate: Alfaro y el TUCEA

Ante la posibilidad de que a partir de ahora y hasta el domingo 13 de mayo –cuando se celebrará el primero de tres debates entre los candidatos a la gubernatura– nazca una eventual corriente denominada Todos Unidos Contra Enrique Alfaro (TUCEA), el abanderado del partido Movimiento Ciudadano ya advirtió:

“Estoy listo para ello. No me voy a hacer como quien el otro día, pues no contestó una sola pregunta”, en clara referencia a su enemigo declarado Andrés Manuel López Obrador y su conducción durante el debate de los candidatos a la Presidencia de la República. Alfaro Ramírez reiteró: “Yo sí voy a contestar todas y cada una de las cosas que tenga que contestar”.

Luego pretendió curarse en salud. Dijo: “Cuando no tienes nada que temer, cuando tu trayectoria ha sido pública y ha estado a la vista de todos desde hace tanto tiempo, ¿qué más me van a inventar?”.

Para que nadie se diga luego desilusionado, más vale que no se haga ilusiones sobre lo que será este debate, pues difícilmente atestiguaremos una guerra de ideas y propuestas de políticas públicas a desarrollar por cada uno de los candidatos en caso de ganar la elección. Claro que habrá propuestas de acciones de gobierno, pero serán las menos o en las que la ciudadanía ponga poca atención.

Lo que sí podemos esperar, por supuesto, es un debate de contraste en donde el centro de los cuestionamientos será Alfaro Ramírez y su reciente paso por la presidencia municipal de Guadalajara de la que no pocos le tienen un listado de críticas y cuestionamientos qué hacerle y que pondrá a prueba su temperamento, su paciencia y su tolerancia para no encenderse a la primera provocación.

Por ejemplo, en los últimos días corre en redes sociales un desplegado que bajo el título “¡¡Los jaliscienses no olvidamos!!”, se hace un listado de lo que consideran agravios cometidos por Alfaro Ramírez durante los poco más de dos años que gobernó Guadalajara, acompañados de notas periodísticas –de prensa, radio y televisión–, y entre los que destacan (cito textual) los siguientes:

“No olvidamos como trataste a los comerciantes como delincuentes”

“No olvidamos como mandaste golpear a los colonos del Parque San Rafael”

“No olvidamos como utilizaste la fuerza pública contra los vecinos del Dean”

“No olvidamos como ofendiste y mandaste encarcelar a un señor de la tercera edad”

“No olvidamos como destruiste una tradición tapatía y dejaste sin patrimonio a los calandrieros”

“No olvidamos como sacaste a golpes a los de la Feria del Calzado”

“No olvidamos la ofensa a los católicos con tu obra El Sincretismo”

“No olvidamos tu prepotencia y ofensas con la que trataste a los ciudadanos de diferentes colonias que te reclamaban algo justo”

“No olvidamos como lucraste con tus Planes Parciales de Desarrollo que solo sirven para tus negocios inmobiliarios familiares”

“No olvidamos como gastaste 42 millones en ‘obras de arte’ inservibles, habiendo tantas necesidades más importantes y vitales”

“No olvidamos como quisiste coartar la libertad de expresión de los medios de comunicación con tu famosa carpetota mandando el mensaje que los tienes vigilados las 24 horas”

“No olvidamos que garantizaste seguridad sobre todo en tus promesas de campaña y estamos en los primeros lugares en inseguridad a nivel nacional”

“No olvidamos otra más de tus promesas incumplidas al decir que no endeudarías la ciudad y le entregaste a BBVA las cuentas del municipio, manejo de nómina, etc., generando una deuda millonaria”

Y la lista de presuntos agravios –presuntos porque quizás para otro sector de la población no lo son– es bastante larga, tanto que se antoja como un rico material de donde pueden alimentarse sus adversarios para armar su estrategia a desplegar durante el debate.

ES TODO, nos leeremos ENTRE SEMANA.

JJ/I