Un regalo en el día del maestro

Ahora que la educación pasó a ser un tema primordial en las campañas en donde algunos defienden la reforma educativa y el nuevo modelo mientras que otros prometen que de llegar al poder la desecharán, entre el magisterio y las familias se preguntan sobre el futuro de la educación.

Desafortunadamente en México el sindicalismo magisterial pasó a ser una de las fuerzas políticas más importantes y con ello el estar o no de su lado significa en gran medida el triunfo en las elecciones y el condicionamiento para ejercer fuerzas de orden en lo laboral a tan importante sector en la sociedad como es la educación de la nación y su futuro inmediato.

Cuando algunos partidos rompieron alianzas electorales en comicios anteriores con el sindicato magisterial por sus divergentes intereses, se empezó a gestionar una separación entre familias de alto poder y una reforma estructural que ha traído marchas, bloqueos, plantones, incendios, despidos, suspensiones de labores por meses completos, detenciones, muertes y millonarias pérdidas económicas, incluso padres de familia que llegaron a someter maestros, raparlos y exponerlos al ridículo como traidores a la patria.

A pesar de todo, con gran firmeza, se estableció el SNEE–Inee, que al examinar a los profesores mediante un examen estandarizado creó las condiciones para ingresar y permanecer en el servicio profesional docente acabando con algunos vicios como la compra y herencia de plazas. Desde luego que al sindicato no le gustó que se comenzaran a aplicar sanciones diversas por la incapacidad profesional como la pérdida de plazas o la reasignación. La reforma educativa ha intentado poner en orden a un gremio que definitivamente incide en lo administrativo en la gestión escolar y la gobernanza para que en lo didáctico y lo pedagógico se logren avances e innovaciones que recorran el espectro educativo en temas que son ya indispensables en los escenarios internacionales como es la educación bilingüe, la educación financiera y emprendedora, la robótica y el diseño digital, la educación virtual, la educación emocional y para la paz, la educación de la salud y el deporte, entre muchas otras.

Sería triste ver que tanto tiempo, esfuerzo y dinero en enormes investigaciones para la mejora de la educación se vean colapsadas entre la política, las urnas y las conveniencias partidarias. Un regalo en el día del maestro debiera ser que México independientemente de los colores de los partidos asegure para nuestros hijos que en el siguiente sexenio nos concentremos en ofrecer una educación de calidad que es la única manera de incentivar la producción, eliminar la pobreza, incrementar la seguridad y proteger nuestra independencia económica nacional.

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@Saucedodlallata

JJ/I