�A qui�n presion� Alfaro?

En su colaboración del pasado martes en El Informador, titulada “La línea que Alfaro borró”, la periodista Gabriela Aguilar hizo revelaciones interesantes al hablar sobre el escándalo que le estalló al gobernador del estado tras la sospechosa licitación para el arrendamiento de maquinaria pesada para el campo.

Gabriela Aguilar coincide con quienes hemos abordado el asunto sin cortapisas, y sobre las revelaciones hechas por El Diario NTR Guadalajara que ponen al descubierto presuntas irregularidades de los alfaristas en la licitación que se supone ya investigan la Contraloría y la fiscalía anticorrupción, escribió: “Pone en evidencia que la transparencia que presumen (los alfaristas), se queda sólo en el discurso; que la política de cuates que en otro momento criticaron y que les sirvió como campaña, parece que se sigue ejerciendo. El gobierno que promete refundar las instituciones, no atina en lo básico: la rendición de cuentas (otro de sus slogans)”.

Pero es en el siguiente párrafo de su colaboración en el que hace interesantes e importantes revelaciones de algo que sospechaba podría ser posible, pero que no contaba con elementos para afirmarlo, lo que me hace suponer que ella sí los tiene. Dijo: “La administración que presume ser diferente, actuó igual que sus antecesores. Primero trató de minimizar el reportaje y al periódico, luego, tras bambalinas, presionó a otros medios de comunicación y a periodistas para que no hicieran eco de la publicación…” (Negritas de este columnista).

¿A qué medios y periodistas presionó, “tras bambalinas”, el gobernador Enrique Alfaro Ramírez para que no hicieran eco de la publicación de El Diario NTR Guadalajara? ¿Qué medios y qué periodistas acataron dócil y sumisamente la presión, “tras bambalinas”, de Alfaro Ramírez para no hacer eco de la publicación de El Diario NTR Guadalajara? Haciendo un análisis y recuento de los medios y periodistas que no han abordado el tema o que lo han hecho superficialmente, creyendo que con eso no quedan mal con sus seguidores, y que sobre otros temas han sido críticos, podríamos sacar conclusiones y enlistar nombres y apellidos.

Esta escena que refiere la también conductora del noticiario del mediodía en Zona 3 me remonta al discurso alfarista titulado “México no necesita silencio”, al que hice referencia en mi columna de ayer, y concretamente a las líneas donde el entonces alcalde de Guadalajara decía: “Requerimos medios capaces de ejercer sin obstáculos una función ética alejada de las mentiras y con una independencia real (…). No todos los medios (…) ejercen esa independencia (…), muchos prefieren quedarse callados para no incomodar…” (Negritas de este columnista).

Alfaro agregó: “Quienes han renunciado a la labor de informar y utilizan los medios de comunicación para lucrar, no le hacen ningún favor a los periodistas que se dedican a decir la verdad, a quienes se arriesgan a perder su trabajo o su vida por ejercer su libertad”.

Pregunto: ¿qué pasa con aquellos medios, como dijo Alfaro, que “no ejercen esa independencia” y “prefieren quedarse callados para no incomodar” al gobernante que los presiona para no hacer eco a publicaciones como las de El Diario NTR Guadalajara? ¿Qué con aquellos medios que “han renunciado a la labor de informar” y que “no le hacen ningún favor a los periodistas que se dedican a decir la verdad, a quienes se arriesgan a perder su trabajo o su vida por ejercer su libertad”, cuando lo hacen obligados por la presión del gobernante para no hacer eco a publicaciones como las de El Diario NTR Guadalajara?

Hay mucho trecho entre el dicho y el hecho, pero muy preocupante es que quien en el discurso evoca la libertad de expresión, “tras bambalinas” presione a medios y periodistas para que guarden silencio. ¿A cambio de qué?

ES TODO, nos leeremos ENTRE SEMANA.

JJ/I