Sanders confirma el plan para migrantes

WASHINGTON. La opción del gobierno estadounidense de llevar a migrantes sin documentos a las llamadas ciudades santuario se mantiene como opción, confirmó ayer la vocera de la Casa Blanca, Sara Sanders.

El presidente Donald Trump quiere explorar una propuesta rechazada dos veces para enviar migrantes a ciudades santuario, informó el domingo la Casa Blanca, aunque no sea la solución preferida para arreglar el sistema migratorio.

No se trata de la "primera elección" que haría el presidente estadounidense Donald Trump, pero sí es algo que la administración podría hacer, reconoció al manejarse por primera vez esta opción sobre "retos logísticos", que no la hicieron viable.

La secretaria de prensa de la Casa Blanca, Sarah Sanders, dijo que es una de muchas opciones sobre la mesa. La administración Trump está lidiando con un influjo masivo de centroamericanos que cruzan la frontera y que han llevado al sistema de inmigración a un punto del colapso.

Pero ahora "está bajo consideración de nuevo", dijo ayer Sanders en entrevista con el programa This Week de la cadena ABC, luego de que el pasado viernes el diario The Washington Post reveló el proyecto.

Las ciudades santuario han limitado su cooperación con el gobierno federal estadounidense en materia migratoria y entre otras se encuentran Chicago, Denver, Filadelfia, Los Ángeles, Nueva York, San Francisco y Seattle.

La noche de este sábado en un tuit el mandatario indicó que Estados Unidos tiene "el absoluto derecho legal" para arrestar inmigrantes sin documentos y trasladarlos a ese tipo de ciudades, en particular las del estado de California.

INCOMPETENTES

Los demócratas en el Congreso no tienen la inteligencia requerida para evaluar las declaraciones de impuestos del presidente Donald Trump, declaró el domingo la vocera presidencial.

La vocera, Sarah Sanders, dijo en el programa Fox News Sunday que ella no cree que los legisladores demócratas sabrían cómo evaluar esos documentos.

Trump se ha negado a publicar sus declaraciones de impuestos, cosa que han hecho todos los presidentes anteriores recientes.

Una comisión de la Cámara baja ha exigido las declaraciones de Trump, citando como autoridad una ley de la década de 1920, y le ha dado hasta el 23 de abril al Servicio de Rentas Internas (IRS) para que entregue las declaraciones de hace seis años hasta acá.

La semana pasada Trump se negó nuevamente a divulgar sus documentos alegando que estaban bajo auditoría, aunque el mismo IRS ha aclarado que una auditoría no le impide a un individuo publicar sus datos.

El presidente ha dicho también que sus documentos son demasiado complejos para que la gente los entienda.

Según Sanders, esa gente incluye a los legisladores que según ella no son capaces de “examinar las décadas de éxitos que ha tenido el presidente a fin de averiguar cosa alguna”.

"Al presidente le gusta la idea y los demócratas han dicho que quieren que estas personas entren en sus comunidades, así que veamos si funciona y todos obtendrán una victoria”

Sarah Sanders, vocera de la Casa Blanca

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