Todo ha tenido que ver con la m�sica

2019-06-08 21:26:35

Planes. La cantante comenzar� a grabar canciones para un nuevo proyecto despu�s de dejar el programa que durante 29 a�os dirigi� en Radio Universidad de Guadalajara: S�lo jazz. (Foto: Cortes�a Daniel Solorio)

La voz de Sara Valenzuela es única. Varias generaciones pueden situarla como parte del desarrollo de la escena musical de la ciudad en los últimos 10 o 15 años. Amante de la música, de todo tipo, pero sobre todo el rock y el jazz, recibió en su casa, en la colonia Americana, la nueva aventura que emprende: ser directora de radio en la XEJB del proyecto que encabeza Alejandro Tavares y, por otro lado, comenzar a grabar otras canciones para un nuevo proyecto después de dejar el programa que durante 29 años dirigió en Radio Universidad de Guadalajara: Sólo jazz.

Incansable, tiene muy claro que lo que sea que haga ahora será sin ataduras y con la libertad de que pase lo que pase, la música siempre estará en su camino.

NTR. ¿Cómo empezaste a interesarte por la música?

Sara Valenzuela (SV). Nunca fue algo que me cuestionara porque se dio de manera muy natural. Desde muy niña hubo mucha música en mi casa y me gustaba, aunque nadie se dedicaba a la música, mi abuelo materno, mi madre y mis tías tocaban el piano, mis padres escuchaban música clásica, trova, mi hermano luego comenzó a escuchar rock. Estuve en una escuela en donde el desarrollo artístico era muy importante, ahí uno de los maestros nos ponía a tocar y a cantar. En cuarto año se montó Jesucristo Superestrella y José Fors lo dirigía, fue todo un acontecimiento en la escuela. Desde ahí tuve la sensación clara de que quería estar en el escenario, ahí seguí con las clases de guitarra y hacía mis canciones, pero montamos una adaptación de Amor sin barrera, ahí grabamos un disco en donde tuve muy poca participación, pero también me enamoré de la experiencia de encontrarme en un estudio.

NTR. ¿Fue detonante de que siguieras en el camino?

SV. José fue una influencia muy importante para mí, ya en mi adolescencia comencé a asistir a los conciertos y a sentirme parte de una comunidad. En un momento me invitaron a hacer coros en algunas bandas, ya en el 90, estudiando Comunicación en el ITESO, me invitaron a una banda, que se llamó Mala Vida, donde yo ya era la cantante, estuvimos cantando un buen rato y ahí conocí a Richie Arreola, donde comenzó La Dosis. Hicimos demos para que nos ficharan las disqueras grandes, porque ser independiente no era una medida. Duramos hasta el 2002, cuando comencé como solista.

NTR. ¿Recuerdas lo que sentiste al dar ese primer paso?

SV. Terror. Fue raro, tuvimos que decidir terminar La Dosis. Entonces pensar en ser independiente era muy raro. Terminamos el contrato con Sony y cada uno tenía planes distinto, comencé mandándole una canción a una disquera que se llamaba Opción Sónica, uno de los primeros sellos independientes fuertes en México de Edmundo Navas, que sacaron una edición llamada Mexican Divas, yo había comenzado a armar bocetos como el de Para continuar, justo esa canción. La sacaron y comenzó a salir en compilados muy diversos, a partir de eso me empezaron a invitar y yo tenía como tres canciones, fue un proceso de ponerme a trabajar, haciéndolo yo sola, con mis limitantes, así se aceleró todo el proceso y armé una banda. Fue importante para mí mostrar una propuesta que fuera realmente mía. Así comencé a componer y siempre me acompañaron otros músicos y estuvieron conmigo.

NTR. ¿A partir de ahí todo despegó?

SV. No. Me topé con pared, muchas disqueras me rechazaron porque decían que lo mío igual no era tan comercial, una disquera incluso me dijo que sólo funcionaría en otro país. Javier Sánchez produjo mi primer disco. Lo sacamos en su sello Fugazi, donde toqué en Nueva York con músicos increíbles, con los que apenas soñaba tocar. Tuve que ser gestora de mi propia obra.

NTR. ¿Qué piensas para el futuro? ¿Cómo es hacer música ahora?

SV. La idea es ya no hacer un solo disco completo, pero sí grabar y sacar canciones. He trabajado con varios músicos en un ejercicio acústico de los tres discos, volver a esas canciones con un formato súper orgánico que espero que salga en agosto como una probada de lo que va a venir después. A mí no me funciona componer con la idea de llegar a cierto público. Pero por otro lado, tienes que ser muy leal a quien eres, a la persona que eres, sólo podía seguir apostando a que lo mío saliera, pero también tienes que ser muy consciente de que lo que quieres, eso me parece respetable, los músicos que quieren ganar dinero, tener conciertos de 5 mil personas y a veces les funciona a veces no, me importa que hay artistas súper genuinos con su público. Cuando veo un músico que me mueve para mí es un músico respetable porque logra comunicar algo. Hay muchos proyectos hechos para ser un hit pero a lo mejor no te dice nada. La buena música perdura.

NTR. ¿Cómo es la música que quieres hacer ahora?

SV. Quiero hacer música que a mí me emocione. No tengo expectativas de hacer giras porque tengo otras cosas en mi vida que son importantes, yo hago música porque me gusta, porque me llena porque para mí es como una liberación. Ya no estoy preocupada como cuando tenía 20 años, todo el mundo quiere vivir de lo que te gusta, y yo lo hago, a mí me gusta que alguien llegue y me diga que tal canción le pegó, que esté conectado. De eso se trata todo. Ahora mismo estoy explorando cosas con mi voz que antes no me atrevía, y me encanta. Con el tiempo también ya no te importa tanto lo que opina la gente, esa parte se relaja, me queda claro que voy a seguir esto siempre, aunque haya a quien no le guste. Dejemos que fluya.

NTR. ¿Dejarte llevar por lo que viene?

SV. En la música hay muchas cosas que no dependen de ti y que tiene que ver con los lugares que vas y la gente con la que te relacionas. Muchos de los pasos importantes de mi carrera se dieron casi como casualidades. No sé si es destinado, creo que uno lo va forjando: siempre me gustó la música y soy afortunada porque todo lo que he hecho desde que me acuerdo ha tenido que ver con la música desde varios frentes.

NTR. ¿Así fue también Solo jazz?

SV. Comencé con el programa de forma extraña, en realidad conocía muy poco del jazz, yo conocía más bien de rock, pero cuando comencé a conducir fue apasionante, empecé a escuchar y profundizar, ahí conocí gente que con el paso de los años me fue llevando a otros lugares. Me puse a organizar ciclos y conciertos, conocer lugares detrás del escenario y luego vino Tónica con Gil Cervantes y llegó para explorar esa parte de la música de forma más educativa y didáctica. Ha estado todo siempre conectado.

NTR. ¿Cómo fue dejarlo?

SV. Fue abrupto porque de pronto surgió la oportunidad de tomar una decisión de moverme a Jalisco Radio para dirigir, lo que es un súper reto, yo estoy muy acostumbrada a hacer mis producciones y mi programa, ahora tengo que dirigir a un grupo de gente y en una radio que estuvo un poco abandonada, apagada, vamos a reinventarla, es una radio que nos entregan en un lienzo en blanco con un equipo genial que tenía muchas ganas de hacer cosas, vamos a incluir mucha música de varios géneros. Empezaremos el 24 de junio con la primera propuesta: la gran oportunidad es que es una radio cultural para incluir nuestros contenidos. Estoy muy emocionada y feliz de lo que viene.

“Quiero hacer música que a mí me emocione”

“Ahora mismo estoy explorando cosas con mi voz que antes no me atrevía, y me encanta”

“La gran oportunidad es que es una radio cultural para incluir nuestros contenidos”

Sara Valenzuela, cantautora

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