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(Foto: Especial)
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Las acusaciones de haber robado un vehículo con una niña en él convencieron al juez, que mandó al hombre golpeado como piñata detenido en Tonalá a esperar juicio en prisión.
El 30 de julio se difundió un video por las redes sociales en que aparecía el imputado colgado de lo alto de una vivienda y abajo un policía municipal dándole palos.
Era Joaquín Uriel N, señalado de haber robado una camioneta Ford Ranger que a bordo tenía una niña dormida.
El juez lo vinculó a proceso penal por los delitos de robo calificado y robo de infante, con medida cautelar de seis meses de prisión preventiva y un período de tres meses para el cierre de las investigaciones por parte de la Fiscalía del Estado.
La institución sostiene que ese día Joaquín Uriel amenazó con una casanga a una pareja propietaria de la camioneta, despojándolos del vehículo.
Una vez realizado el reporte del robo, policías municipales detectaron el vehículo y marcaron el alto al sospechoso, iniciando una persecución que terminó cuando estrelló la camioneta contra una jardinera.
Arrinconado, el hombre se metió a una mueblería causando daños y luego a una casa desde la cual se pasó a un templo.
Los policías declararon que desde ahí les arrojaba piedras y amenazaba con tirarse en caída libre si intentaban apresarlo. Bomberos intervinieron y lo aseguraron, pero el episodio de piñata humana fue videograbado por los asistentes al espectáculo en la calle Alberca y Juárez.
EH
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