Quinto Patio

El Consejo General Universitario de la UdeG aprobó un Plan de Austeridad y Ahorro 2022. Que no haya crecido el presupuesto, que metieran recortes para privilegiar las tareas sustantivas, que aplicaran tijera a las bolsas extraordinarias y el cálculo malhecho de la inflación están detrás de la decisión, dijo el rector general Ricardo Villanueva Lomelí.

Que gastos y erogaciones operativas se limitarán a lo indispensable, que será restrictivo el uso de vehículos asignados y que no se comprarán nuevos; que se reducirán los contratos por honorarios, se limitará el pago de tiempos extras y días adicionales, que habrá más videoconferencias y menos desplazamientos, entre otras medidas. ¿Se quitarán tooooodos los privilegios? ¡Bien! Que se mantenga la operación sustantiva es lo importante.

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Mientras ayer continuaban los enjuagues en el Congreso del Estado para, pese a toooooodas las críticas, sacar adelante la dedosignación de la futura presidente y su suplente del Instituto de Transparencia (Itei), el Consejo Consultivo de este organismo se dejó escuchar nuevamente. Y advierte que, como es del conocimiento del Legislativo local, hay diversos juicios de amparo pendientes de resolver por el Poder Judicial federal, y de que se ordena la suspensión del proceso de selección, es “incorrecto” se haya continuado éste “mientras no sea determinada la legal procedencia de la convocatoria emitida”.

El Consejo Consultivo del Itei lamenta que no haya sido escuchado ni sus observaciones tomadas en cuenta por el Congreso local, con lo cual los diputados y diputadas desatendieron a las organizaciones sociales, ciudadanas, académicas y profesionales “que alertaron sobre los vicios de ilegalidad” del proceso. Algo queda claro: la mayoría de los legisladores locales obedecen las líneas que les marcan “arriba”, y consideran al Itei parte del botín político a repartir…

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A huevazos recriminaron a 19 diputados que aprueben, así nomás, sin debate ni nada, las iniciativas del gobernador Enrique Alfaro. Un grupo de ciudadanos acudió ayer al Congreso, colocó una manta con las fotografías de 19 legisladores emecistas, panistas, priístas y verde ecologistas para lanzarles docenas de huevos (y eso que está carísimo), todo porque convirtieron al Legislativo en oficialía de partes del Ejecutivo.

Advirtieron que si el gobernador dice “ladren”, esos diputados lo hacen sin chistar. Así funciona actualmente la separación de poderes en Jalisco y los manifestantes lo recriminaron. Los trataron de traidores del pueblo y servidores de Alfaro, pero ¿importó a los aludidos? Por supuesto que no; si no les interesa la elección del nuevo titular de la Comisión Estatal de Derechos Humanos, ¿cómo les van a interesar este tipo de cosas? Ah, pero si se trata de la presentación del libro de un funcionario como Enrique Ibarra, ahí están puntualitos, hasta lo compran y piden firma, como si lo fueran a leer.

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Revuelo causó la imagen fotográfica con chanfle político en la que aparecen charlando, en la CDMX, el rector general de la UdeG, Ricardo Villanueva Lomelí, y el presidente nacional de Morena, Mario Delgado. No es la primera ocasión que se reúnen, pero sí llama la atención porque, obviamente, no hablaron de la educación universitaria.

Recordemos que Villanueva Lomelí estuvo en el anterior gabinete estatal y que contendió por el PRI a la alcaldía de Guadalajara, ocupó el cargo de regidor, pero prefirió retornar a terreno conocido como rector del Centro Universitario de Tonalá y de ahí a la rectoría general. En encuestas de intención del voto, aunque lejanas de 2024, aparece con nada despreciables simpatías. Y si ya contendió por la alcaldía tapatía, bueno, podría, tal vez, tal vez, hacerlo de nuevo. Pero… ¿con M…?

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jl/I