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(Foto: Archivo NTR/JAM)
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El crecimiento desordenado de la ciudad que provoca, entre otras consecuencias, que familias vivan en zonas que no tienen servicios públicos o sean deficientes tuvo la anuencia de los gobiernos municipales.
Así lo describe el trabajo académico La conformación del corredor periurbano sur del Área Metropolitana de Guadalajara: reconstrucción histórica e instrumentos de ordenamiento territorial, publicado el 14 de junio de 2024 por la y los investigadores Tulia Leal Arriaga, Jesús Rodríguez Rodríguez y Antonio Vieyra.
Uno de los puntos claves consiste en que los gobiernos municipales permiten que sea el mercado inmobiliario el que dicte las reglas para el crecimiento de la ciudad. La investigación critica que las autoridades municipales prefieran ahorrarse la dotación de servicios públicos que dotarlos de calidad; al final, quienes pagan los platos rotos son las familias que llegan a habitar esos sitios.
“Los Municipios permiten la explosión de los núcleos urbanos cerrados de acuerdo con las demandas del mercado inmobiliario. El equipamiento urbano básico queda en el capital privado, por lo tanto, deja a la administración pública con menores obligaciones para la dotación de servicios públicos en detrimento de los habitantes de esas zonas”, describe el documento.
Según el trabajo, fue a partir del año 2000 cuando comenzó la expansión territorial hacia la zona sur de la ciudad, por el corredor de López Mateos y más allá del Periférico. Las construcciones en esa zona se dieron en medio de la paradoja de poder recibir a mucha población, pero sin contar con servicios públicos de calidad o al menos suficientes.
“Determinadas zonas van conformándose con ciertos servicios privados, pero a su vez se observa carencia de servicios públicos o insuficiencia de estos, problemas de movilidad, falta de suministro de agua y, en cierta medida, las diferencias de segregación socioespacial”, señala.
Ante ese panorama, los investigadores advierten que el papel de los planes de desarrollo es y debe ser crucial para determinar hacia dónde y cómo crecerá la ciudad, principalmente porque la tendencia marcada en los censos es que continúa el crecimiento poblacional, pero en las zonas más allá del Periférico.
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