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Ni ratificación ni revocación: renuncia

El portal ANNURtv, que se identifica como “el primer canal árabe e islámico de Latinoamérica para todo el mundo”, publicó ayer la siguiente información que vale la pena reproducir frente al debate que hemos generado en Jalisco sobre la polémica ratificación de mandato de los gobiernos alfaristas y que se desata actualmente por la discutible iniciativa del presidente Andrés Manuel López Obrador sobre la revocación de mandato.

Bajo el título “Renunció todo el gobierno de Finlandia por no cumplir con lo prometido en campaña”, el cuerpo de la nota dice:

“El primer ministro finlandés, Juha Sipila, presentó su renuncia y la de su gobierno de centro-derecha, luego de que fracasaran sus intentos de promover una serie de medidas que incluían reformas sociales y del sistema de salud del país. La negativa del parlamento de Finlandia llevó a que su cúpula tome esta drástica decisión”.

“La información fue confirmada por el mismo presidente finlandés, Sauli Niinisto, que fue quien recibió esta renuncia y la aceptó, pero a cambio le pidió a Sipila que continúen en funciones dentro del Poder Ejecutivo hasta el 14 de abril que se celebrarán las próximas elecciones”.

“Pese a que sea una extraña decisión, desde el seno del gobierno finlandés habían advertido que renunciarían en el caso de que nuevamente fracasara la aceptación de estas reformas, ya que las consideraban un punto fundamental dentro de su programa de gobierno”.

“Mi gobierno trabaja según el principio de ‘resultados o dimisión’”, declaró Sipila a la prensa.

“‘Soy un hombre de principios, y en política hay que asumir responsabilidades (…). Asumo mi parte de responsabilidad’, agregó”.

“Finlandia –agrega la nota de ANNURtv– cuenta con un grave problema poblacional, ya que cuenta con una de las tasas de envejecimiento más altas de Europa y esto genera un gran desequilibrio en las finanzas del Estado ya que podrían afrontar los gastos de jubilación y seguridad médica”.

“En 2015, el país europeo salía de una gran depresión económica y solamente un 68 por ciento de la población en edad laboral gozaba de un empleo. Año tras año, ese número subió a 72 por ciento en 2018. Pese a eso, el Estado deberá elevar esa tasa hasta el 80 por ciento, de manera gradual pero concreta, según confirmaron funcionarios públicos encargados de esta cuestión”.

“Ante la imposibilidad de conseguir la aceptación de una reforma, que según el gobierno de Sipila sería efectiva para esta problemática, decidieron dejar sus cargos. En su mayoría, los políticos de este país europeo coinciden en la necesidad de una reforma, pero no de la manera en que fue propuesta”.

Hasta aquí la nota del canal árabe e islámico de Latinoamérica. Y pregunto: ¿dónde carambas dice que ante el fracaso por sacar adelante las reformas que prometió en campaña y considera necesarias para el país, el primer ministro Sipila se sometió a la ratificación de mandato en un proceso organizado por su propio gobierno –como juez y parte–, como ha ocurrido aquí en Jalisco con los gobiernos emanados del partido Movimiento Ciudadano? ¿O dónde dice que Sipila presentó al Poder Legislativo de su país una iniciativa para someterse a la figura de revocación de mandato en una fecha determinada o cuando haya nuevas elecciones en su país?

Allá en Finlandia nada de que “el pueblo pone y el pueblo quita”. Allá, por vergüenza propia, los gobernantes que no son capaces de cumplir sus promesas y compromisos de campaña toman la decisión de renunciar al gobierno y no presumen someterse a la voluntad de los ciudadanos mediante mañosos procesos manipulados por ellos mismos, su partido o sus huestes en el Legislativo.

¿No son estas acciones dignas de imitar? ¿No debe ser la vergüenza propia la que obligue al gobernante a renunciar por los compromisos no cumplidos?

ES TODO, nos leeremos ENTRE SEMANA.

da/i