Judicial: reforma al vapor

¿Cuál es la urgencia que tienen los diputados alfaristas de Movimiento Ciudadano para aventar a la mesa de negociaciones una reforma al proceso de designación de magistrados del Supremo Tribunal de Justicia que no cuenta con el aval del resto de las fracciones parlamentarias?

¿Acaso es otra de las cartas que desde palacio de gobierno y Casa Jalisco ordenaron se hiciera pública para mantener arriba cortinas de humo y distraer la atención ciudadana para que no se centre en problemas verdaderamente graves como, reitero, el brote infeccioso que ya registra 67 casos –con dos muertes de por medio– en 14 hospitales del estado; el caos en la atención médica que prevalece en el Hospital General de Occidente, mejor conocido como Zoquipan, y que ha rebasado la capacidad de atención en recién nacidos que obligó, incluso, a que se habilitara para su atención un área del Hospital Geriátrico que se encuentra subutilizada; así como el enorme retraso en la apertura del Hospital de la Mujer que lleva ya medio año cerrado cuando inicialmente sólo dejaría de prestar atención por un mes?

¿Es de ese tamaño la incapacidad e incompetencia de las autoridades para resolver los problemas más urgentes y prioritarios como para estar levantando cortinas de humo cada 24 horas? ¿O por qué, entonces, los legisladores se apresuraron a subir el tema del Poder Judicial de tal manera que obligaron a las comisiones respectivas a emitir dictámenes elaborados al vapor, sin el consenso necesario ante la importancia y trascendencia del tema, y posteriormente fue presentado al pleno para su primera lectura, simplemente para cumplir con un mero trámite legislativo?

Y es que los propios diputados declararon que a partir de estos dictámenes se abría, más que la discusión, la tradicional negociación del reparto de cuotas partidistas en el Supremo Tribunal de Justicia. Actualmente existen cinco lugares vacantes y se espera para antes de agosto la renuncia de otro magistrado, con lo que serían seis los espacios disponibles. De acuerdo con versiones de fuentes cercanas al Legislativo y en los corrillos judiciales, esos espacios prácticamente ya están negociados y repartidos: tres para el partido alfarista en el gobierno Movimiento Ciudadano, dos para Acción Nacional, que ha mantenido una postura dócil ante el gobierno y que espera le sea respetado su espacio en el Consejo de la Judicatura que está por ser renovado, y uno más que pronostican será entregado a Morena.

Con el tiempo, independientemente de la reforma que se apruebe para elegir a los nuevos magistrados, confirmaremos si los diputados mantienen la bonita tradición del reparto de cuotas en el Poder Judicial.

Pero con las reformas presentadas ayer al pleno para primera lectura se entreabre la puerta para que el Poder Judicial recurra a la controversia constitucional con amplias posibilidades de que le sea favorable si se mantienen algunos puntos con los que los magistrados se han manifestado en contra, como es la intervención de terceros en el proceso de elección o designación de magistrados –entiéndase la Comisión de Participación Ciudadana y las universidades–, así como la aplicación de una prueba de control y confianza que aun cuando dependería del Poder Judicial, el Legislativo designaría a quien estaría al frente de él.

Los diputados le apuestan a que a partir de este momento se abre el período de discusión y negociación entre las fracciones parlamentarias y el Poder Judicial, por eso es ocioso abordar las propuestas sometidas a primera lectura, pero avizoro una controversia constitucional que llevaría a que, por el momento, se cubran las vacantes con el actual proceso de selección y se congele cualquier modificación. Al tiempo.

ES TODO, nos leeremos ENTRE SEMANA.

JJ/I