Desodediencia civil deja tres muertos

Jartum. Luego de que la oposición llamó a sus simpatizantes a la desobediencia civil en Sudán, al menos tres personas murieron y otras tantas resultaron heridas en enfrentamientos contra las Fuerzas de Apoyo Rápido (FAR), en Um Durman y en Jartum del Norte.

Con información del Comité de Médicos, opositores al régimen que domina Sudán y quienes llevan un registro de las víctimas mortales y heridos desde diciembre de 2018, diferentes medios de comunicación internacional informaron que el enfrentamiento en Um Durman fue contra milicianos de Yanyaud.

Según el portal electrónico de La Vanguardia, el vocero del Comité de Médicos, Osman al Tahir reveló que el enfrentamiento inició cuando dos jóvenes estaban en la barricada que cerraba el acceso a una calle y los integrantes de las FAR retiraron los obstáculos causando heridas graves a los manifestantes, quienes murieron al llegar al hospital militar.

La tercera víctima fue identificada como Walid Abderlrahaman, quien falleció en Jartum del Norte, luego de que recibió un disparo en el pecho.

De acuerdo con estimaciones del grupo opositor, el total de personas muertas desde el 3 de junio, cuando iniciaron las agresiones contra manifestantes, a la fecha, asciende a 117.

El llamado a la desobediencia civil se presentó luego de que el primer ministro de Etiopía, Abiy Ahmed, llegó a Sudán para mediar en la crisis política entre los militares que ejercen el poder y la oposición, en medio de un llamado de la ONU para el envío inmediato de expertos para investigar las violaciones a los derechos humanos en el país africano.

Orden. La ONU propone un equipo de monitoreo de derechos humanos, ante los disturbios. 
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La mediación de Ahmed se da también luego de que la Unión Africana anunció la suspensión de Sudán de todas las actividades de esta organización, hasta que se establezca una autoridad de transición a cargo de civiles y se resuelva la crisis política que vive el país.

Sudán reportó enfrentamientos esta semana en los campamentos de manifestantes, asentados desde hace unos meses en la ciudad capital, Jartum, donde cifras preliminares reportan entre 61 y 100 personas fallecidas.

Ante estos disturbios, la Oficina del Alto Comisionado para los Derechos Humanos (ACNUDH) propuso el despliegue inmediato de un equipo de monitoreo de derechos humanos de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) para examinar las denuncias de violaciones de derechos humanos cometidas desde el 3 de junio.

Los manifestantes exigen a los generales que entreguen el poder a una autoridad civil, luego de que fuera derrocado el presidente Omar al Bashir a manos del Ejército.

Sudán vivió un golpe militar el 11 de abril, que puso fin a los 30 años del gobierno del presidente Omar al Bashir y siguió a varios meses de protestas con decenas de muertos y centenares de heridos.

El Ejército formó un consejo militar transitorio que asumió el poder y prometió traspasarlo en dos años a las nuevas autoridades elegidas.

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11 De abril, golpe militar en Sudán

JJ/I