Hasta 15 funcionarios, víctimas de amenazas

El fiscal estatal Gerardo Octavio Solís Gómez afirmó que entre 10 y 15 funcionarios municipales y estatales han sido víctimas de amenazas, por lo que el viernes pasado los delincuentes “se quedaron cortos” al concretar sus objetivos.

Sin embargo, ante tal especulación, los funcionarios amenazados ya toman en serio las amenazas y ya refuerzan su seguridad como precaución.

El funcionario describió los ataques del pasado viernes contra miembros de la Fiscalía Estatal y la Secretaría de Seguridad como “concertados, estructurados secuencialmente y con precisión para atacar a objetivos elegidos con anterioridad”. 

La cronología de los ataques respondió a una sucesión: a las 7, 8 y 10 horas del viernes debían cumplirse los eventos en Tlajomulco y Zapopan.

Luego del primer ataque, en el que murió Jesús Adán Bautista Martín del Campo, ocurrió un enfrentamiento de más de tres horas.

Solís Gómez precisó que todavía no se establece la relación de los detenidos con la muerte del policía investigador.

De acuerdo con el fiscal, el ataque se motivó por oportunidad, es decir, por la cercanía del evento con el grupo armado.

Explicó que en la implementación del anillo de seguridad en el sitio, ubicaron una finca en el fraccionamiento Jardines del Edén donde ya habían desplegado labores de investigación. En la revisión de ciertas zonas, fueron recibidos a balazos. 

Tras esta agresión, la seguridad en la ciudad se reconfiguró y un grupo de más de 100 elementos municipales, estatales y federales apoyó a los elementos policiacos que se encontraban en el lugar para neutralizar a los atacantes.

Al terminar el enfrentamiento se detuvo a cinco personas, quienes fueron puestos a disposición del agente del ministerio público. Ya pasaron por la audiencia de control y se espera la audiencia de vinculación a proceso, que se llevará a efecto el próximo viernes.

En la casa acribillada el personal de la fiscalía aseguró 12 armas largas, 7 cortas, 2 granadas de fragmentación y 3 vehículos. 

Luego de la ejecución de Julio César Álvarez Martínez en Villas de San Martín, se reportó un civil fallecido con huellas de atropellamiento.

En el registro del cadáver le fue localizado un teléfono del oficial de la Secretaría de Seguridad caído en ese sitio y se le relacionó con los hechos.

La coordinadora de Puestos de Socorro de la fiscalía, también fue víctima de un ataque armado, pero resultó ilesa, aunque su marido resultó lesionado.

Solís Gómez reiteró que seguirán los operativos en la zona, así como diversas indagatorias pues se presume que distintos grupos armados tienen casas de seguridad en Tlajomulco tratando de pasar desapercibidos.

El fiscal de Jalisco descartó amenazas previas contra los tres agentes de la Fiscalía y de la Secretaría de Seguridad víctimas de atentados.

“Un atentado de dimensiones nunca antes vistas”

En un encuentro con lo que él llamó el equipo de la Fiscalía Estatal, el gobernador del estado, Enrique Alfaro Ramírez señaló que lo que pasó el viernes es “algo que duele muchísimo, porque perdieron la vida compañeros de esta institución; pero no fue en un hecho aislado o circunstancial”, sino que respondió a un hecho planeado para pretender doblar al gobierno.

El viernes tres miembros de la fiscalía fueron víctimas de atentados en lo que el fiscal Gerardo Octavio Solís Gómez calificó como actos “concertados, estructurados secuencialmente y con precisión para atacar a objetivos elegidos con anterioridad”. Dos de los elementos perdieron la vida.

El gobernador dijo que el objetivo de los delincuentes era atacar a “muchos más” elementos de la fiscalía en “un atentado de dimensiones nunca antes vistas en nuestro estado”.

“Yo no voy a permitir como jalisciense que al final de mi sexenio digan que entregué el estado a la delincuencia”, señaló antes de pedir la ayuda de los elementos de la fiscalía para combatir el crimen.

No se trata, dijo, de declarar guerras ni de hacer actos de valentía innecesarios, “se trata de que todos entendamos que no podemos agachar la cabeza”.

JJ/I