Con el cuchillo entre los dientes

La selección mexicana logró avanzar a las Semifinales de la Copa Oro y lo hizo con una gran dosis de sufrimiento. El duelo eliminatorio ante Costa Rica demostró que las diferencias pueden ser mínimas.

Hay que ser claros: México es el gran favorito a llevarse el título; sin embargo, lejos está de ser un mero trámite acceder a la Final. Esta competencia, hasta aquí, ha demostrado que el escenario general está cambiando, y aun en dicho contexto, los dirigidos por Gerardo Martino deben estar un paso adelante de sus contrincantes.

El duelo contra los ticos fue apretado, con errores y disputado con mucha intensidad. La escuadra nacional se vio superada por momentos, fue irresoluta ante algunas circunstancias o poco clara. Con la misma precisión hay que señalar que, difícilmente, veamos un juego donde se aplaste o humille a algún rival, eso no sucederá.

Y será así por dos razones: los adversarios han encontrado herramientas futbolísticas precisas para competir y el equipo de El Tata aún está en un proceso de adaptación, de aprendizaje.

La siguiente cita, en Semifinales, será ante el sorpresivo equipo de Haití, y aunque para algunos aparezca como un compromiso de relativa complejidad, lo cierto es que los caribeños son una revelación en la Copa Oro: llegan luego de eliminar a Canadá y también es oportuno recordar que, en su último juego de la fase de grupos, superaron al conjunto costarricense.

El peor escenario para México sería caer en una cuota de excesiva confianza. El favoritismo es claro, tanto como la posibilidad de ser sorprendido.

La selección mexicana tiene referentes claros, decisivos: Guillermo Ochoa, Andrés Guardado y Raúl Jiménez, por ejemplo. Ellos deben ser los guías ante la juventud de hombres como Antuna, Rodríguez, Gallardo, Álvarez, y eso requiere tiempo. Gerardo Martino es el responsable de encontrar soluciones prácticas en este escenario competitivo y con la complejidad de que el equipo atraviesa por una etapa de maduración.

Sigo sosteniendo que México llegará a la definición por el título; sin embargo, si se piensa que Haití será un escalón sencillo y, por ende, así se encara el juego, las condiciones para una eventual complicación serán notables, y ello cambiaría toda apreciación sobre este ciclo que apenas va comenzando.

Director de Deportes/TV Azteca Jalisco

@ArielLeguizamon

JJ/I