Nerviosos por suceder a Lomelí

Llegó el viernes, concluye la semana, y al menos al momento de redactar estas líneas la coordinación de Programas Sociales del gobierno federal continúa vacante tras la renuncia de Carlos Lomelí Bolaños y la promoción y autopromoción de no pocos aspirantes a sucederlo. No hay aún “humo blanco” en Palacio.

Esta semana volvieron a barajarse diversos nombres de posibles elegidos, pero desde el Palacio Nacional no ha salido la instrucción o nombramiento que todos esperan y que trae nervioso o más de uno. ¿Qué espera el presidente Andrés Manuel López Obrador para designar a su superdelegado en Jalisco? ¿De qué depende para definir el nombre y apellido de quien será responsable de aplicar el proyecto de la Cuarta Transformación en el estado?

No hay que perder de vista también que dependiendo del nombre del sucesor de Lomelí Bolaños se sabrá hasta qué punto estará involucrado en la conformación de Morena como partido en Jalisco o se dedicará de tiempo completo a su encomienda y dejará que sean otros los que trabajen en esa ruta que actualmente hace el coordinador en funciones de presidente Hugo Rodríguez Díaz, y cuya tarea inmediata es preparar el terreno para la elección de la nueva dirigencia.

Trasciende que son muchas las voces que pretenden influir en la designación del próximo superdelegado, incluso la de algunos destacados empresarios que buscan impulsar a sus amigos para tener, a través de ellos, una puerta por dónde llegar a las altas esferas del lópezobradorismo.

Más de un empresario, aseguran, le ha llamado a Alfonso Romo a recomendar a tal o cuál personaje, pero al parecer sus voces no han sido escuchadas… todavía.

Lo que sí es un hecho es que hoy la superdelegación se encuentra acéfala. ¿O alguien sabe que haya quién realiza el trabajo que venía haciendo Carlos Lomelí? ¿Alguien sabe qué hace Juan Soltero, de quien se dice que quedó como encargado de despacho pero de lo cual no hay ninguna notificación oficial ni siquiera por parte del coordinador de superdelegados, Gabriel García Hernández? La última información emitida fue el pasado martes 17, pero fue precisamente información nada más, sobre el apoyo que el gobierno de AMLO otorga a las personas con alguna discapacidad. Después de eso, total silencio, porque no hay nadie que lleve a cabo las tareas que corresponden al superdelegado.

Sin duda que al conocerse el nombre del nuevo coordinador de programas sociales se levantarán infinidad de especulaciones, versiones, interpretaciones y lecturas sobre quien tendrá esa responsabilidad y lo que con él se puede esperar sobre el futuro de Morena como partido político.

La gran pregunta es que si siendo las superdelegaciones un espacio reservado para que rinda cuentas a la Presidencia de la República, a través del jefe de superdelegados, López Obrador escuchará a Carlos Lomelí para designar a su sucesor o el empresario farmacéutico estará vetado para opinar al respecto, luego de que la Secretaría de la Función Pública anunció que le han abierto siete investigaciones en contra, cuatro a sus empresas y tres a su persona.

Otro escenario que advierten algunos cercanos a los grupos morenistas y lópezobradoristas –que aunque se dude, no son siempre lo mismo-, es que si bien Lomelí Bolaños no dejará a su sucesor si podría llegar en su lugar alguien con quien él pueda seguir haciendo trabajo político si es que no tiene impedimento alguno para hacerlo que haya salido desde Palacio Nacional.

De ser así, estaríamos confirmando lo que comenté en una entrega anterior: que ya sin ninguna restricción, Carlos Lomelí realizará trabajo político a placer, independientemente de que él vuelva a ser aspirante a un nuevo cargo público o no, cosa que considero que ya es difícil que suceda. Pero en esta 4T todo puede suceder. Al tiempo.

ES TODO, nos leeremos ENTRE SEMANA.

[email protected]

JJ/I