Trato de ídolo

CIUDAD DE MÉXICO. Ocho años después de marcharse a Europeo, Guillermo Ochoa vuelve al equipo de sus amores: el América.

En medio de gritos, empujones, caídos y mucha pasión, el arquero llegó ayer a la Ciudad de México para incorporarse como refuerzo de las Águilas en el Torneo Apertura 2019.

La expectativa por el retorno de uno de los últimos ídolos del americanismo era mucha entre sus seguidores, sobre todo entre las barras, que convocaron a darle un recibimiento inolvidable.

Desde antes de las 14 horas, aproximadamente 400 aficionados americanistas llegaron a la Terminal 2 del AICM y prácticamente tomaron la puerta de salida de llegadas internacionales.

Se encargaron de hacer un pasillo por donde Ochoa caminó hasta la salida, no sin antes advertir a los representantes de los medios de comunicación que ese camino era sólo para el guardameta y que nadie más, ajeno a ellos, podría invadirlo.

Conforme el reloj avanzaba lo cánticos aumentaban, los instrumentos sonaban hasta su máxima potencia y que terminaron por explotar cuando vieron los primeros rizos de la cabellera del cuatro veces mundialista.

“Estoy muy contento de regresar, muy feliz”, indicó Memo a su llegada antes de que los integrantes de las barras del equipo se lo llevaran para hacerle pasillo.

En medio de empujones, golpes y amenazas verbales, los barristas abrieron paso para que Ochoa avanzara, lo que generó un mayor caos y que algunos terminaran en el suelo.

La pasión no terminó ahí, se trasladó hasta la camioneta que se llevó al arquero, ya que algunos apasionados seguidores se subieron al toldo para arengar ahora la despedida de uno de los últimos ídolos del americanismo, que ya está otra vez en casa.

Ochoa se convirtió en uno de los ídolos de América durante su trayectoria con el equipo entre 2004-2011, en los que ayudó a la conquista de los títulos del torneo Clausura 2005 y el Campeón de Campeones 2004-2005.

En su primera etapa en México, en la que debutó a los 19 años, el 15 de febrero de 2004 bajo la dirección técnica del holandés Leo Beenhakker, estuvo en 204 partidos bajo los tres postes del América. Recibió 256 tantos y dejó en blanco su marcador en 55 ocasiones.

La institución azulcrema no ha revelado las condiciones económicas del acuerdo con Ochoa, pero se habla de alrededor de 4.4 millones de dólares al año, lo que se traduce en 85.3 millones de pesos, percibiendo poco más de 7 mdp al mes.

Marche la pasa mal

Con Agustín Marchesín en el arco titular, el Porto de Portugal sufrió una inesperada eliminación en la tercera fase de clasificación a los grupos de la Champions League. Los lusos perdieron 3-2 como locales en el Estadio do Dragao ante el Krasnodar de Rusia

Obligan los títulos

Miguel Herrera, técnico del América, reiteró la obligación que tienen las Águilas por ganar cualquier trofeo que se le presente, por lo que dejó en claro que la consigna será la de vencer esta noche al Atlanta United para adjudicarse la Campeones Cup.

“Obvio que la gente no esté tan metida en un torneo que apenas empieza, pero para nosotros es muy importante; América es un equipo que a donde salga debe buscar ganar y los títulos que se enfrente los quiere levantar”, dijo.

El estratega indicó que muestra de la seriedad que se le dio a este cotejo es que tiene contemplado a su mejor plantel: “Venimos con lo mejor que tenemos, lo tomamos con la seriedad debida de que este torneo seguro tomará fuerza, pero para nosotros es muy importante”. Notimex

JJ/I