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Deben revisarse uso de recursos en elecciones pasadas

(Foto: Cuartoscuro)

El ex consejero del Instituto Nacional Electoral (INE), Marco Antonio Baños, consideró que los señalamientos que hizo la defensa de la ex funcionaria federal, Rosario Robles, tienen inconsistencias en el tiempo, pues en las elecciones de 2012 el escándalo ligado con el PRI fue la presunta compra de votos a través de Monex, y no la Estafa Maestra.

Mencionó que en las elecciones de 2015, y en las de 2017, particularmente en el Estado de México, sí hubo denuncias de Morena y otros partidos en contra del gobierno federal por usar recursos de programas sociales y eso es lo que se tiene que investigar.

“Por los montos que están involucrados, la Estafa Maestra involucra casi 2 mil millones de pesos, me parece que tendrá que ser revisado con mucho cuidado por las autoridades y obviamente deslindar responsabilidades y si establecen con claridad que ese dinero fue hacia las campañas, entonces se tendrá que informar a la autoridad para que desde la perspectiva de la fiscalización se haga una revisión adicional si es que eso procede, y la parte de los delitos penales que sigue su curso hasta el momento”.

En entrevista para Informativo NTR, con Guillermo Ortega Ruiz, dijo que el caso no tendrá prescripción porque la parte penal sigue corriendo con el desahogo de las investigaciones correspondientes.

“Y en materia de fiscalización se tendría que hacer una denuncia específica ante el Instituto Nacional Electoral, aquí la prescripción correrá a partir del momento en el cual se tenga certeza de esas posibles conductas, si es que las hubiera, y obviamente el INE podría proceder a hacer las revisiones correspondientes”.

Baños Martínez consideró que este caso sí tendrá incidencia en el proceso electoral del próximo año, pues en México suelen usarse estos escándalos para sacar provecho político. 

“Al final de cuentas están involucrados personajes de administraciones partidarias que tienen colores de partidos políticos, y evidentemente la percepción, ya no digamos desde la perspectiva de los delitos electorales o delitos penales, pero sí es un hecho que la gente tiene percepciones de cómo se desempeñan los partidos y sus funcionarios públicos y esa parte es la que me parece que está en juego ahora”.

JB