INICIO > ZMG
A-  | A  | A+

Villas Panamericanas, ‘el caballo de Troya’ de las inmobiliarias: Augusto Chacón

(Foto: Jorge Alberto Mendoza)

El tema de las Villas Panamericanas no es nuevo, tiene una década debatiéndose qué se hará con ellas, manifestó el director del Observatorio Ciudadano Jalisco Cómo Vamos, Augusto Chacón.

Señaló que las Villas Panamericanas fueron un caballo de Troya, que en un principio aparentaba solucionar el problema que se generó con los Juegos Panamericanos, pero terminó siendo una ventana para el desarrollo inmobiliario en la zona del Bajío.

Reiteró que desde hace 10 años se discuten las implicaciones medioambientales, sociales y culturales que generará la habitabilidad de las Villas Panamericanas.

Para Augusto Chacón ante la ley todos somos iguales, por lo que una vez que se otorgue la habitabilidad a las Villas Panamericanas no habrá poder judicial que frene la ocupación de la zona del Bajío.

“Sería prácticamente inevitable que la zona del Bajío, zona de recarga de mantos acuíferos, banda de protección, de amortiguamiento del área natural protegida en la vecindad a unos cuantos metros que es el bosque de La Primavera, que la perdamos y que no solo la perdamos en términos de paisajismo sino de impacto ambiental y de paso social, no es una zona estupendamente conectada para que unos cuantos comiencen a ocupar casas y otro tipo de servicios”.

Reiteró que los inversionistas de las Villas Panamericanas no son culpables de creerle al gobierno del Estado e invertir, pero convertir estas instalaciones en habitaciones no es la solución al problema.  

Augusto Chacón consideró que la estrategia de venta de los departamentos de las Villas Panamericanas tiene como objetivo incrementar a las personas involucradas que confían en las autoridades, pero también implica un incremento del daño ambiental.

“Es incrementar la cantidad de personas involucradas que en algún momento reclamarán lo que por derecho les corresponde y por haber confiado, la autoridad es a la que le toca, a la autoridad estatal, al Ipejal que puso una parte del dinero ahí, pero también a la sociedad y no podemos seguir haciendo que la deuda crezca y va a crecer en todo sentido, deuda financiera con quienes pusieron su dinero, la deuda social por el impacto que tendrá en Guadalajara y la deuda medioambiental”.

EH